Dos kioskos que estaban ubicados al frente del desembarcadero artesanal de Chimbote, fueron desalojados para despejar el pase y no obstaculizar la procesión de San Pedrito.
Ambos comerciantes habían sido notificados con anterioridad pero no hicieron caso, tal es así que ayer al promediar las 2 y 30 de la tarde, la Municipalidad llevó un cargador frontal para ayudar a uno de ellos que tenía estructura metálica a retirarse de la zona.
Por suerte no hubo ningún tipo de resistencia por parte de los vendedores quienes llevaron el kiosko desarmado a sus casas y saben que si quieren hacer negocio deben gestionar ante la Municipalidad el permiso correspondiente pero no esta manera.
Uno de ellos vendía golosinas y el otro comida, lo hacía desde hace mucho tiempo sin las condiciones higiénicas, sin embargo, se le ha venido dando plazo de manera reiterativa para que pueda modificar su condición, no lo han hecho y ahora la sanción ha sido retirarse.