Confianza traicionada que le costará la cárcel. El mozo de una pollería del centro de la ciudad dejó al descubierto su verdadera vocación al convertirse en aliado de dos sujetos para robar en el restaurante en el que trabajaba.
Cuando estaba cerrada, la Pollería “Wilson”, de la tercera cuadra de la avenida José Pardo; fue visitado la madrugada del domingo por tres sujetos quienes entraron sin necesidad de escalar paredes ni violentar la puerta de entrada debido a que tenían las llaves para ingresar.
Estas llaves fueron entregadas a dos delincuentes por el mozo Gerson Barboza Vásquez y una vez en el interior se percataron que estaba presente la dueña del establecimiento que dormía ajena a todo lo que sucedía. De todos modos la despertaron para intimidarla con amenazas y de ese modo asegurarse que nadie obstaculice sus pretensiones.
Los maleantes revisaron las oficinas y cajas de registro llegando a encontrar la suma de 6 mil soles que es lo que llevaron además de algunos artefactos.
Pasado más de 24 horas del robo, los autores fueron capturados por efectivos policiales de la comisaría de Chimbote en la esquina del jirón Bolognesi con Roque Sáenz Peña por donde transitaban tras asistir a locales nocturnos de baile donde presuntamente gastaban el dinero robado.
Los detenidos fueron identificados como Giancarlos Palacios Quesquén (20) y Edmundo Quesquén Amaya (18) y posteriormente fue capturado el mozo Barboza Vásquez tras ser delatado por los primeros.
Con esta experiencia la dueña de la pollería, cuya identidad la reservó la policía, ya no entregará las llaves de su establecimiento a algún trabajador.