Editorial

ACTUALIDAD Y POLITICA

SISMO

Quienes vivimos la penosa experiencia del terremoto del 31 de mayo de 1970, volvimos a recordar algo de aquellos difíciles momentos cuando la madrugada de ayer sábado comenzó a temblar la tierra y obligó a miles de personas a abandonar sus viviendas en medios de gritos de espanto y pavor . Ello porque este movimiento sísmico ha sido quizás el más fuerte e intenso desde aquel de hace cuatro décadas atrás, eso es evidente. Lo de ayer ya no fue un temblor fuerte, ha sido un sismo y así lo demuestran las cifras proporcionadas por el Instituto Geofísico del Perú al precisar que ha sido un sismo de 5.6 grados en la escala de Richter que se registró a la 01: 42 de la madrugada de ayer, siendo el epicentro a 52 kilómetros al suroeste de Chimbote y tuvo una profundidad de 49 kilómetros. Este movimiento sísmico tuvo una intensidad de grado II en la zona costa, lo que quiere decir que ha sido uno de los movimientos más violentos después de muchos años. Y nuevamente surge la pregunta de los 64 mil soles ¿estamos preparados para hacer frente a un terremoto en nuestra jurisdicción? Después de 45 años la verdad es que no se ha mejorado mucho, la población no sabe aún como controlarse frente a un movimiento sísmico de magnitud, incluso, a pesar que muchos niños y jóvenes en edad escolar son preparados constantemente, a la hora de la verdad el miedo y temor hizo presa de ellos y solo pensaron en salir corriendo a las calles. No se toma en cuenta que dentro de la misma vivienda existen zonas de seguridad y hay que conocerlas bien para evitar que la misma desesperación y la angustia nos genere lesiones o accidentes que pueden resultar de gravedad. Este fuerte sismo no solo ha servido para que las placas subterráneas de nuestro subsuelo liberen energía y se disipe de esta manera la posibilidad de un terremoto de gran magnitud que algunos agoreros se la pasan anunciando hace mucho tiempo, sino para que los funcionarios de defensa civil y los propios directores de los planteles afiancen sus programas de orientación y simulacro para mejorar en este aspecto.

DESLIZ

La Sala Penal de Apelaciones ha corregido un gravísimo error que lo hizo notar nuestro medio de comunicación al haber señalado fecha para la audiencia de apelación del Ministerio Público en el caso de “los donantes de Waldo Ríos” para el mes de abril cuando para entonces la impugnación ya no tendría sentido. Este caso tiene que ver con el pedido del Ministerio Público para que se amplíe por siete meses más el plazo de la investigación en la medida que están esperando información de los Bancos en donde se ha levantado el secreto financiero de los investigados, sin embargo, a nivel de primera instancia el juez denegó esa petición para que el plazo de la pesquisa se extienda hasta el 13 de Febrero. De ser así el Fiscal tendría que formular su requerimiento acusatorio en un breve plazo, sin embargo, debido a la huelga judicial esa apelación no pudo ser resuelta por la Sala Penal y recién ha fijado fecha sin percatarse que el plazo solicitado es hasta febrero, lo que quiere decir que si se revisa la carpeta en Abril, como lo había dispuesto, ya la materia impugnatoria no tendría sentido alguno. Nos imaginamos que los magistrados han pegado su jalón de orejas al especialista que revisó este expediente y señaló la fecha de audiencia sin percatarse que se requería resolverse antes de la segunda semana de Febrero. Por lo menos ahora se podrá pronunciar una semana antes del plazo que había solicitado el Fiscal. A nuestro juicio debería convalidarse la petición del Ministerio Público habida cuenta que ya tuvo el tiempo que solicitó.

CONFLICTO

El tema del terreno para el futuro hospital La Caleta tiene para rato. La congresista María Elena Foronda se fue de boca el pasado último fin de semana y adelantó que el informe del Ministerio de Salud habilita los terrenos del P.J. Dos de Mayo para la construcción del futuro nosocomio, sin embargo, para el gobierno regional de Ancash esa no es la mejor alternativa. Desde un principio el “chef” Enrique Vargas advirtió que ellos no darían su visto bueno a esos terrenos y, por lo visto, plantearán que se edifique en los terrenos del estadio Manuel Gómez Arellano y el viejo Coliseo Paul Harris porque son más accesibles y cuentan con servicios de saneamiento idóneo. Esto quiere decir que para que se deslinde estas posiciones deberán realizarse más reuniones, deberán escucharse a los técnicos y los meses seguirán pasando. Si los técnicos del MINSA han evaluado estos terrenos y los han declarado viables, si la Municipalidad está dispuesta a invertir para su compra con la condición de la entrega de actual inmueble, se supone que no habría problemas, sin embargo, para que se concrete esto debe contarse con la firma del gobernador regional. Parece que este conflicto nos deja mucha tela por cortar.