Cuando la comunidad chimbotana aún no se recuperaba del escándalo registrado en el Ministerio Publico del Santa por un millonario desfalco orquestado desde el interior de la propia institución, el Director Regional de la Producción, Ingeniero Ricardo Takamura Salazar, denunció el descubrimiento de otro fraude, esta vez cometido en el Desembarcadero Artesanal de Chimbote.
Los hechos tienen el mismo sesgo delincuencial y fraudulento que aquel que se registró en la Fiscalía, es decir, se inflaron gastos, se declararon servicios fantasmas y se clonaron y falsificaron facturas con la única finalidad de justificar gastos no realizados pero cuyos montos fueron a parar a los bolsillo de los sinvergüenzas.
Fueron los peritos de una empresa de auditoria los que explicaron en el marco de una conferencia de prensa los alcances de este nuevo caso bochornoso en el que sujetos a los cuales le confían la administración de fondos públicos, lo que hacen es aprovecharse de los mismos y montan todo una maquinaria delincuencial para ello.
En efecto, señalaron sin pelos ni señales que el responsable de este tinglado, el ex administrador David Méndez Ramos había establecido un sistema de cobros mediante doble boletaje, de tal suerte que llevaba una cuenta paralela y solo declaraba una, la cual maquillaba con facturas falsas, adulteradas o clonadas con la finalidad de reducir las cifras y poder quedarse con la mayor cantidad de dinero posible.
Los auditores y el director de la producción mostraron a los periodistas las copias de los documentos fraudulentos que se utilizaron para disfrazar los manejos dolosos a las cuentas del desembarcadero, todos los cuales habían sido insertados en una denuncia que el asesor legal de la entidad regional ya había entregado a la Fiscalía de turno a efectos que se inicien las pesquisas, se denuncie a los responsables y se dicten ordenes de prisión para todos los involucrados.
Y es que, tal como ocurrió en el Ministerio Público, no es posible que todo este montaje haya sido implementado únicamente por el ex administrador David Méndez Ramos, por el contrario, entienden que existen otras personas involucradas, sin embargo, esperan que sea el Ministerio Público quien las identifique y sancione.
Pero el propio Director Regional de Pesquería admitió que se vio precisado a retirar de la administración a David Méndez hace ya un buen tiempo atrás en la medida que era fácil advertir que existía un mal en razón que las deudas de la institución crecían desmesuradamente y los pedidos de embargo de entidades como la Sunat, AFP’s, Municipios y las prestadoras de servicios básicos como Hidrandina, sedachimbote y la compañía telefónica menudeaban.
El funcionario señaló que esta situación que encontró al acceder al cargo, le hacía sospechar que existían malos manejos en la Administración del Desembarcadero Artesanal y pese a las comunicaciones que le hizo llegar el dirigente jamás le respondió de manera satisfactoria, por ello es que se decidió a retirarlo del cargo y contratar a una empresa de auditoría de confianza que es la que ha hecho los hallazgos de una escandalosa y millonaria treta.
Por ello es que no ha vacilado en señalar que han procedido a denunciar penalmente en la medida que el ex administrador ha manejado cuantiosas cifras y jamás rindió cuentas ante nadie, a pesar que fue nombrado hacia 3 años atrás y que tenía el respaldo de la entidad que lo llevó a esa función.
En efecto, por la forma como se ha concebido la estructura de organización del Desembarcadero Artesanal, el administrador es elegido por alguna de las entidades que forma parte de dicha infraestructura, en este caso ha sido la Asociación de Buzos de Chimbote que es presidida por Ulises Moya Chiclayo, que es quien le debe una explicación a la ciudadanía por estos hechos.
Empero, ello no obsta que la Dirección Regional de Producción fiscalice a quienes utilizan los recursos públicos de la institución, confirmando la existencia de un forado financiero generado por el fraude perpetrado por el ex administrador, de acuerdo a los que han mencionado los peritos.
Llama poderosamente la atención que otros directores regionales de pesquería no le hayan puesto la mano al ex administrador si se tiene en cuenta que la pericia ha permitido revisar los balances desde el año 2014 en que Méndez Ramos asume el cargo, por lo que se entiende que esto pudo detenerse hace mucho tiempo.
Lo cierto es que los malos manejos se advirtieron desde un primer momento, la auditoria ha podido detectar que desde que antes que asuma el cargo el ex administrador David Méndez el Desembarcadero tenía ingresos mensuales del orden de los 86 mil soles, sin embargo, bajo su mando apenas al mes siguiente ellos se redujeron a 32 mil soles, lo que debe darnos una idea de la dimensión del fraude que se ha registrado en esta entidad que corresponde al gobierno regional, por lo tanto, el manejo de sus recursos tiene naturaleza pública y deben ser sancionados de manera drástica y contundente.
Además de ello, se tiene que tener en cuenta que el principal denunciado en este tema, el ex administrador David Méndez es Contador Publico de profesión, lo que quiere decir que ha sido el principal promotor de este esquema delincuencial y que nadie podría haberlo engañado en caso se pretenda deslindar responsabilidad entre otros trabajadores.
La Fiscalía tiene en sus manos otra gravísima denuncia sobre los fraudes que se vienen cometiendo en las instituciones apelando a maniobras delictivas como la clonación de facturas, la falsificación de documentos, la alteración de cuentas y balances, con la finalidad de aprovecharse de los recursos de las entidades y lucrarse a expensas de las arcas y el erario público y regional.
Esperemos que en este caso se accione con la misma contundencia que se ha observado en el caso del Ministerio Público, que se resuelva no solo con celeridad sino demandando los apremios legales que se imponen ante estas acometidas fraudulentas. Ya es tiempo de detener los fraudes por doquier.