GRAN FAVOR
El Gobernador regional Enrique Vargas Barrenechea se decidió por fin a salir de su marasmo y llegó anteayer por la tarde a Chimbote con la finalidad de observar personalmente la magnitud de los daños registrados como consecuencia de las lluvias y los desbordes del último martes por la noche. Claro que su actitud es tardía y asumimos que responde a las advertencias y amenazas que lanzaron públicamente las autoridades locales en el sentido que lo denunciarían penalmente por omisión a sus deberes funcionales, derivado de sus ofrecimientos de recursos y combustibles sin que hasta la fecha llegara nada de ello a pesar de la situación de tragedia que viven los pueblos de Chimbote y de los distritos de la provincia del Santa. Lo cierto es que Vargas se apareció en el puente de río Lacramarca, en la zona de Pardo, y, cuando los periodistas lo abordaron titubeó en muchos momentos a la espera que uno de los tantos asesores que lo rodea le sople la respuesta, en una muestra evidente de mediocridad. Lo grave es que mientras realizaba este periplo, la mañana de ayer jueves estaba citado con marcada anticipación para que se presente al inicio del Juicio oral que ha dispuesto el Primer Juzgado Penal Unipersonal de Huaraz en su contra por delito de falsedad genérica en agravio del Jurado nacional de Elecciones, proceso este que tiene que ver con la falsa declaración jurada que presentó afirmando haber estudiado para ser “chef” en un Instituto de gastronomía de Chile, en donde se dice que este instituto no existe. La juez Roxana Violeta Luna León, al verificar que no existía justificación alguna del gobernador o su defensa técnica, procedió a hacer efectivo el apercibimiento de ley y lo ha declarado la mañana de ayer reo contumaz, por lo tanto dispone su inmediata ubicación y captura a efectos que sea puesto a disposición del Juzgado. Increíble pero cierto, en plena emergencia en la región y el gobernador que no ha sido capaz de comunicar al juzgado que tiene que realizar desplazamientos diversos y justifique su ausencia. Ahora le ha dictado orden de captura y gran favor que le hace a los ancashinos que ya no queremos ver a autoridades mediocres al frente del timón regional.
LIMPIEZA
Cierto es que los embates de las últimas lluvias han sido contundentes y ha diezmado la capacidad de respuesta de la población que no está acostumbrada a esta clase de fenómenos atmosféricos. Sin embargo, son las autoridades las que no deben bajar la cabeza frente a los efectos y daños registrados en la propiedad pública pero que afectan a los vecinos. Una de estas consecuencias son los desbordes de agua y lodo, las calles lucen totalmente empolvadas por ello y se dejó varios sectores librados a su suerte sin que se retire el agua que ha perjudicado la carpeta asfáltica. Eso ha sucedido, por ejemplo, con la pista de la avenida Country, en el tramo comprendido entre la avenida pacífico y La Marina, en el cual a pesar que ha sido colocado hace menos de un año, el agua la ha carcomido totalmente y parece una calle de la sierra. Totalmente escarpada. Pero un sector en donde las autoridades deberían tomar cartas en el asunto se registra en la cuadra 10 de la avenida La Marina, en donde se depositaron los restos del huaico que bajó por el A.H. Los Geranios, llegó a la avenida anchoveta y en la Marina el agua y lodo volteó a la izquierda. Allí se ha secado una inmensa capa de lodo que ensucia a todas las viviendas y la Municipalidad Distrital debe apoyar en el retiro de semejante fango que en la medida que se va secando generará una tremenda ola de polvo.
EN CADENA
Pareciera que las lluvias torrenciales están bajando en el mapa del litoral de nuestro país. Primero fue Piura en donde se llegó a percibir tormentas eléctricas que dejaron hecho un desastre la ciudad. Luego fue Chiclayo en donde las lluvias también hicieron lo suyo. El martes fue en Trujillo y Chimbote en donde la secuela ya la conocemos todos. El miércoles el turno fue para Casma y Huarmey en donde, en este último lugar, las intensas lluvias activaron antiguas quebradas y provocaron el desborde del río del mismo nombre de la provincia el cual, a diferencias de años anteriores, trasladó las aguas a la mismísima ciudad de Huarmey que amaneció bajo agua. En ese sector también se ha destruido la carretera Panamericana Norte, lo que quiere decir que el tráfico para Lima está obstruido en Huambacho como en Huarmey. Ojo que la cosa se torna cada día más difícil y el gobierno ya no debe seguir viendo los desastres por la televisión.