En Caserio de Seccha:
Pobladores del caserío de Seccha denuncian obra mal hecha.
El teniente gobernador del caserío de Seccha del distrito de Macate, Francisco Cano Meléndez junto a otros pobladores de la zona, denunciaron públicamente la sobrevalorización de la obra de mejoramiento del servicio de agua de riego en la parte baja de dicho caserío, la cual presenta un avance casi del 70 por ciento y no se está haciendo de acuerdo al expediente técnico.
Esta obra tiene casi dos meses ejecutándose por la empresa Altomayo, cuyo gerente es el señor Wilmer Goñi y financiado por la Municipalidad distrital de Macate, sin embargo, desde sus inicios ha presentado debilidades que no han sido detectadas debido a que casi nunca se hace presente el ingeniero residente ni el supervisor.
“Esta obra está valorizada por mas de 300 mil soles y lo están haciendo mal, no respetan el expediente técnico, las tuberías las están colocando encima de piedras y no sobre una cama de apoyo además que lo están haciendo sobre una pendiente que de presentarse una lluvia fuerte, se cae todo por la mala ubicación”, señaló el teniente gobernador quien llegó acompañado a Chimbote de otros pobladores de la zona, como Miguel Contreras Aquino que es el presidente del Comité de Obras y Richard Cano Mejía.
La sobrevalorización radica en que están utilizando tubos que en la realidad cuesta 150 soles 6 metros pero ellos lo cotizan a 200 soles cada metro, además los fierros que están poniendo en el desarenador es de tres octavos cuando debe ser de media.
“Cuando hemos ido a la Municipalidad de Macate a querer hablar con la alcaldesa del tema, no la encontramos, pero volveremos a ir a ver si por fin, está y nos da una respuesta”, señaló el teniente gobernador invitando a cualquier ingeniero de obras que compruebe como se viene ejecutando la obra para que efectivamente vea que tan cierta es la denuncia.
También se viene elaborando un informe sobre las deficiencias de la obra para presentarlo ante la Fiscalía y que se investigue para que se sepa la verdad, sobre todo que lo que se busca es beneficiar a los 22 propietarios de terreno que están en la zona y no afectarlos.
Lo curioso es que la empresa a cargo de la obra, está gerenciada por las mismas personas que ha tenido obras en Marcapampa y el caserío de San Blas.