GOBERNADOR
La supuesta notificación de la ejecutoria suprema que confirmó en todos sus extremos la condena de cinco años de cárcel efectiva contra Waldo Ríos Salcedo, ha servido como pretexto para que ciertos grupos interesados y decepcionados por no haberse aupado a la gestión de Luis Gamarra, comiencen a lanzar rumores en relación a la necesidad de elegir a un nuevo Gobernador. Para ello asumen que con la ejecutoria suprema el consejo regional debe reunirse para sancionar la vacancia de Waldo Ríos y de inmediato elegir a un nuevo Gobernador. Esto es totalmente errado y descabellado. Se elige a un nuevo gobernador cuando no existe uno en funciones por alguna causal establecida en la ley. Sin embargo, en Ancash si tenemos Gobernador y ese es Luis Gamarra Alor que en este momento es el encargado por mandato de la ley Orgánica de Gobiernos Regionales. No hay porque hacerse tanto barullo en este tema cuando la ley es clara. Señala la manera como se remplaza al Gobernador cuando éste es suspendido. Señala que el Vice Gobernador asume funciones y establece como se remplaza a éste cuando también es suspendido. Lo que sucede es que en ninguna Región ha ocurrido lo que sucede en Áncash, es decir que suspendan al primero y al segundo, menos aún establece de manera expresa que es lo que debería hacerse en caso se declare la vacancia de ambos. Solo determina que en caso se suspenda o se declare la vacancia de Gobernador y vice gobernador quien lo remplaza es un Gobernador encargado, éste se mantendrá en funciones hasta en tanto sea objeto también de una medida de suspensión o de vacancia. Así de sencilla es la cosa. Lo que se tiene que comprender es que en este momento el Gobernador es Luis Gamarra y solo podrá dejar el cargo si es que en una instancia suprema se revoca la condena de Enrique Vargas y lo absuelvan, solo en ese caso se reincorporará como Gobernador. De otra manera no existe posibilidad de remplazar a Luis Gamarra porque la ley no lo contempla.
CASACION
El Fiscal Superior Decano de Huaraz, Dr. Jorge Luis Temple, ha señalado anteayer en nuestra ciudad que una nueva carpeta de investigación contra Enrique Vargas está por concluir y es posible que pase a investigación preparatoria en donde existe siempre la posibilidad que se dicten medidas restrictivas, como una prisión preventiva que es causal de suspensión. Pero ese tema está aún en ciernes, los ojos de los ancashinos se encuentran en este momento en el trámite que se ha dado al anunciado recurso de casación que el abogado de la defensa técnica del “Chef” adelantó que iba a presentar. Ese recurso debe derivarse a una de las dos Salas Penales de la Corte Suprema que deberá evaluar primero su corresponde su admisión, esto se concreta en una diligencia de calificación del recurso de casación, en la cual los magistrados supremos verifican en el expediente si este pedido cumple los requisitos que señala la ley, tanto en la calidad de los delitos que se han investigado como en la penalidades que establece la ley para cada uno de ellos. En este caso, el proceso penal que se ha seguido a Enrique Vargas no cumple los requisitos para ser revisado en instancia de casación, ni por la categoría de los delitos y menos aún por la pena impuesta por el Juez y que ha sido ratificada por la sala de Apelaciones. Sin embargo, la ley siempre deja un margen para aquellos casos en que sin cumplirse los requisitos de la norma contemplen situaciones especiales en las cuales la máxima instancia jurisdiccional considere conveniente emitir un pronunciamiento para dejar sentada jurisprudencia en determinada materia. Tampoco creemos que esto último sea el caso de Vargas Barrenechea, de tal manera que todo indica que su suerte está definitivamente echada y seguirá el mismo camino de la vacancia de Waldo Ríos. Si eso se cumple el Gobernador Luis Gamarra ya no sería el encargado sino el gobernador titular.
TEMBLOR
Ya era tiempo de una buena sacudida, fue el comentario de quienes consideran que es bueno que se sucedan los movimientos sísmicos leves para que el subsuelo libere energía y no se acumule en tal volumen como para que se desencadene en un terremoto. El temblor nos sorprendió a las 4.24 de la tarde de anteayer jueves y, de acuerdo la información del instituto Geofísico del Perú fue de 4.8 grados en la escala de Richter, intensidad IV, con epicentro ubicado a 50 kilómetros de la ciudad de Chimbote a una profundidad de 45 kilómetros. Para los chimbotanos el movimiento no solo fue un buen remezón sino que fue prolongado, lo que quiere decir que podemos estar tranquilos y por un buen tiempo.