Cuando se escriba la historia sobre el Hospital IV de Alta Complejidad de Essalud en Chimbote, un lugar importante será ocupado por el Dr. Jorge Campos Echeandía, gerente de dicha institución en nuestra ciudad entre el 28 de enero del 2013 y 2 de enero del 2017, quien conoce a la perfección el difícil camino que se tuvo que atravesar para conseguir, hoy por hoy, un expediente técnico debidamente viabilizado, listo para ser licitado, bajo la modalidad de asociación pública privada (APP) porque esa fue su concepción desde su partida de nacimiento.
Jorge Campos Echeandía ha querido salir al frente para contar la historia real del nacimiento de este proyecto del Hospital IV de Alta Complejidad, inicialmente propuesto como una obra estrictamente estatal que se ubicaba en el escalón número 12 de la lista de proyectos que esperaban por años ser ejecutados por el Estado; para convertirse luego como una propuesta de ejecución, vía la modalidad de asociación pública privada (APP), con lo cual recién pudo ver la luz.
Pero además, Campos Echeandía, decidió hablar claro y fuerte, para hacer frente a las mentiras y oportunismo del actual gerente de la entidad, su colega Ricardo Loje Cantinet, hoy secuestrado por lo que llama una mafia política y con serios indicios de corrupción que viene desde el gobierno de Ollanta Humala Tasso y que están perjudicando y atentando contra el desarrollo y modernidad de Essalud en Chimbote.
¿Como ingresó a la gerencia de Essalud?
Muy simple, se dieron las condiciones ideales para aceptar el cargo de gerente. Cuando la Dra. Virginia Baffigo asumió la presidencia ejecutiva de Essalud se reunió con el gremio médico y les propuso que hagan llegar una terna de médicos para que ella elija al nuevo gerente de Essalud Ancash- Costa con sede en Chimbote. De esa manera, el cuerpo médico de Essalud Chimbote hizo una convocatoria, con determinado perfil, se pegó una invitación con los requisitos mínimos en el Hospital y así es como me presento, pues cumplía con las exigencias. Acudí y entregue mi currículo, que incluía mi maestría. Fuí el único médico que presentó sus documentos, estuve solo. Acabó el plazo y el gremio médico me respondió que no podía elevar mis documentos porque les habían pedido una terna. Ante ello, ampliaron el plazo, pero ya no exigían. maestría, sino bajaron el nivel y pedían ser estudiante de maestría. Cuando culminó el plazo también presentó sus papeles el médico Ricardo Loje Cantinet, quien estudiaba maestría en ese tiempo, año 2013. Los expedientes fueron a Lima, fueron evaluados por la Dra., Virginia Vaffigo junto a su equipo técnico y asesores y me escogieron a mi. Yo no conocía a nadie de esas personas.
¿Cuando a usted lo reemplaza Ricardo Loje en enero de este año, también hubo una terna que se elevó a la presidencia de Essalud?
No, de ninguna manera, no se hizo una nueva convocatoria, ni nada por el estilo, simplemente se ha manejado el tema políticamente y así se determinó su designación.
¿Cuando usted asume la gerencia de Essalud Chimbote como encuentra administrativamente la institución?
Había una crisis a nivel asistencial y administrativo, un desorden y descontrol total, pero además influencias muy fuertes del contexto político local. Era el inicio del gobierno de Ollanta Humala y el último año de la era Álvarez. Por eso lo primero que recibí fue una visita pintoresca del hijo del congresista Víctor Crisólogo pidiendo trabajo en la institución. Me refirió que tenía su canal de televisión y que podían mejorar mi imagen. No lo aceptamos y a la semana tuvimos la visita del mismo congresista Crisólogo diciéndome que la institución iba mal y que iba a sacar a Virginia Baffigo. Le respondí que si tenía tal poder que lo haga y que no tenían que consultarme nada. Había un clima de agresión interna y externa y me preguntaba porqué, si estábamos haciendo las cosas bien.
¿Era presión política, exigencias del más alto nivel, que ocurría en ese momento?
Empecé a recibir los primeros latigazos, porque de un lado el sistema funcionaba bajo exigencias internas y externas y estas amenazas eran constituidas por los sindicatos principalmente en general y por fuerzas políticas ligadas a Álvarez, que en ese tiempo tenía a su disposición la Fiscalía, la Policía, el Poder Judicial, los colegios profesionales, el MINSA, es decir lo que le faltaba era Essalud y al primer angelito que me envió fue al congresista Crisólogo.
¿Esa presión se dio por el lado de Álvarez, pero por el lado de Ollanta Humala?
Por el lado del humalismo, yo encontré hasta tres grupos que tenían sus operadores, pero que entre ellos eran rivales. Todos querían la mamadera de Essalud y buscaban a su modo, cómo llegar a la mamadera y así empiezan a llegar a visitarme. Buscaban contratos de servicios, de personal para cobrar cupos, de tal manera que tomé la decisión de no aceptar la intromisión ni el chantaje de ninguno de estos grupos, lo cual generó una serie de agresiones y ataques gracias a mi gestión que fueron utilizadas y potenciadas por el gremio médico, cuyos dirigentes me pidieron que colocara a determinado médico en cargos dirigenciales, lo cual también me negué rotundamente, por eso me declararon la guerra y quisieron sacarme del cargo durante los cuatro años que estuve allí.
¿Porque cree que duró cuatro años en el cargo?
Hicimos un trabajo con un equipo de gestión que lo fuimos puliendo progresivamente gracias al conocimiento de más de 25 años de trabajo institucional, fuimos colocando en lugares precisos a gente que ayudara a lograr nortes de mejoría en beneficio del asegurado. Esto significaba un control del manejo administrativo de la institución, es decir, ponerle alto y coto a aquellas personas que estabán dedicadas a lucrar a costa de la entidad. Por ejemplo los gastos de lentes intraoculares se habían elevado exponencialmente y cuando los controlamos bajaron al 10%. En la albúmina que es un medicamento de alto costo, se perdió casi 480 mil soles, era una organización interna que estaba lucrando, por eso despedimos a un farmacéutico y se denunció a la Fiscalía. Esta mafia sacaba albúmina de difuntos, a nombre de niños y lo negociaban a externos. Yo no tenía ningún interés de ser un gerente que viera y dejara pasar, como muchos lo han sido y lo hacen actualmente.
¿Cuando no pudieron con usted, no fueron a quejarse con Virginia Baffigo?
Por supuesto, ella me llamó y me dijo que estaba sorprendida, que mis denunciantes eran peor que terroristas, porque solo me insultaban y no argumentaban para nada las supuestas irregularidades, aunque si se prestaba la estructura organizacional. Le voy a contar, el Procurador Anticorrupción, Richard Asmat presentó una denuncia contra mi gestión en el primer trimestre del 2014, dejando entrever que habría indicios de corrupción en Essalud de Chimbote. El cuerpo médico tomó esa publicación y la pegó en el Hospital durante cuatro años y los operadores políticos del humalismo se encargaban de distribuir y exagerar esa noticia, pidiendo mi cambio.
¿A que operadores políticos del humalismo, se ha enfrentado usted?
El primero Wilfredo Luna Policarpo, luego su sobrino Christian Luna y posteriormente Romi Zúñiga Abregú que luego me enteré fue contratada en la gestión de Jorge Baca Luna porque era la hija del chofer del entonces congresista Freddy Otárola y sé que ahora es la esposa de Luis Chamorro que postuló con PPK y fue gerente de la Sub Región El Pacífico en la época de Waldo Ríos. No acepté ninguna de sus presiones y en el caso de Romi Zúñiga la tuve que sacar porque no trabajaba y se dedicaba a la política, a realizar proselitismo. Luego se fue al Ministerio de Trabajo donde trabajó con Christian Luna, cuando Otárola llegó a ser Ministro.
¿Qué les hizo usted a los Luna?
Nunca les dimos la mamadera, ni las facilidades para que puedan concretar sus negocios. Son operadores que actúan como pulpos de las instituciones públicas, ingresar a lucrar con contratos de servicios, ingresos de personal, gollerías y beneficios personales a nombre del partido, algunos de ellos inclusive pedían dinero directamente y que tampoco acepté.
¿Desde que los conoció eran personas agresivas?
No, no. Le voy a contar, cuando Wilfredo Luna Policarpo fue la primera vez a buscarme, se mostró muy gentil, me dijo que conocía la trascendencia de mi familia en Chimbote, tuvo momentos de ensalzamiento a mi persona y seguro como parte de una estrategia y luego sacó la careta y me dijo quiero tal cosa. Todo terminó cuando cerramos y sacamos al hermano de Christian Luna que era un proveedor de servicios en los módulos de atención a los asegurados. Ese SERVIS terminó en mi gestión porque le ganaron el concurso, no fue porque a mi se me antojo sacarlo, no; hubo un proceso de selección y ganó otra empresa que ofrecía mejores condiciones y con ello, se acabaron los elogios en mi favor y ocurrió todo lo contrario. Pues le tengo que decir, que “extraña y sorpresivamente” esta misma empresa ha regresado con el actual gerente Ricardo Loje Cantinet y lo más curioso, la misma Romi Zuñiga también ha vuelto, nuevamente fue contratada y es lógico imaginar que Wilfredo Luna Policarpo también está por allí. Hay algo más, cuando Wilfredo Luna me visitó por primera vez, a los pocos días de asumir el cargo, me ofreció una entrevista en un medio escrito de Chimbote porque tenían un familiar allí y podían mejorar la imagen institucional con una entrevista. A los pocos días, me llevaron a las oficinas de este medio escrito en Bolognesi, se dio la entrevista y me sacaron al día siguiente en dos páginas. Fui con Willy Luna, ingresé con él a dicho medio y ahora resulta que el día de hoy (jueves 1 de junio) o ayer, se ha publicado una entrevista grande al nuevo gerente de Essalud Ricardo Loje, con quien Willy Luna camina ahora de la mano. El problema está en que ahora Loje se ha dedicado a ensuciar mi gestión y a ellos les interesa eso porque conmigo no pudieron. Yo accedí a la entrevista periodística, pero eso jamás significaba que me iba a someter a Willy Luna, de ninguna manera. Conmigo se le acabaron sus contratos, ahora con Loje han vuelto a Essalud.
¿Y como explica que ellos hayan regresado a Essalud, si Humala ya dejó el poder?
Por Ricardo Loje. Trabajan con él, por eso han vuelto, me gustaría que se lo pregunten a Loje. Me da mucha pena que ello suceda, porque quienes hemos trabajado en Essalud, sabemos lo difícil que es gestionar y conseguir metas y proyectos, para ahora darnos cuenta como este nuevo funcionario ha caído tan fácilmente en el manejo de estas personas que le hacen daño a la institución. Ha empezado a derrumbarse Essalud, acabo de escuchar en Radio Santo Domingo denuncias muy graves que Ricardo Loje habría contratado a una empresa que no tiene registro nacional de proveedor para contratar con el Estado, peor aún cuando su cuñado trabajaba en esa empresa. Le deben más de 90 mil soles y Essalud Lima ha rechazado los pagos, esto es muy grave, me pregunto que hace el Procurador Richard Asmat, que espera para denunciar penalmente o al menos pedir información. Tan mal están las cosas, que ahora el carro de la gerencia lo recoge de su casa al presidente del cuerpo médico, es vergonzoso.
¿Porque Ricardo Loje permite todo esto?
Primero para que no le lancen piedras, para seguir en el cargo y porque también sería parte de las irregularidades, de acuerdo a las denuncias públicas que se han hecho. Dicen que ha metido a su comadre a trabajar en Essalud, amigos cercanos y no se puede manejar una institución con ese concepto.
¿Que siente al ver todo esto?
Cuando yo ingresé a Essalud estábamos en el puesto 21 de 30 redes, durante mi gestión llegamos al segundo lugar a nivel nacional. Este ranking mide indicadores de salud, como número de consultas, camas, etc. Llegamos a ser el primer puesto a nivel de calidad concursando con Rebagliati, Almenara, INCOR, pero hoy, esta nueva gestión no tienen ni siquiera una calificación formal de sus indicadores. Como quiere que me sienta, pues según tengo entendido están por el puesto 11 al 13, pero no tienen ninguna información mensual como lo teníamos en mi gestión.
Por otro lado, ¿Cual es la verdadera historia del Hospital IV de Alta Complejidad?
Hay que empezar aclarando algo. En nuestra ciudad han existido hasta 12 intentos y proyectos para exigirle al gobierno central que ejecute la construcción del Hospital de Alta Complejidad, pero la naturaleza de estos proyectos eran bajo una inversión neta de los recursos del Estado y cuando se revisó los proyectos, estaban en una lista larga ocupando el lugar 21 de un total de 60 proyectos. Es decir, se tenían que construir 21 hospitales para que el siguiente sea el de Chimbote y peor aún, su ejecución tenía naturaleza política y en los años he aprendido que Ancash no tiene fuerza política, estamos muy lejos del poderío de otras ciudades. Es allí, cuando en reunión con la Dra. Virginia Baffigo, ella me dice, que existe una oportunidad de canalizar esta propuesta, pero bajo el mecanismo de asociación pública privada, es decir, con inversión de un privado que luego le cobre a Essalud por la construcción con sus intereses y es allí donde empieza esta historia. Tuvimos que cambiar la naturaleza del pedido e iniciar un perfil técnico pero bajo el amparo de llegar a una asociación pública privada, donde el Estado no invierte un sol, solo paga con intereses, después que se le entrega el Hospital nuevo, equipado, con llave en mano y por un lapso de 15 a 20 años. Nosotros empezamos a elaborar la nueva propuesta, pero primero teníamos que convencer a todos que la APP era posible, pues para esas fechas, este mecanismo había sido satanizado por los cuerpos médicos y nadie quería hospitales bajo esa modalidad. Decidimos iniciar este nuevo proyecto bajo la modalidad de APP y empezó la etapa de preinversión. El proyecto de Baca Luna quedó en el camino como un intento más de los múltiples que existieron.
¿Bajo el sistema tradicional que propuso el ex gerente Jorge Baca Luna era imposible hacer realidad el Hospital IV?
Era imposible. El Estado no tenía presupuesto para ejecutar grandes hospitales, por eso la única alternativa era la asociación pública privada (APP) y lo aceptamos. El sector médico había satanizado las APP, diciendo que se privatizaba ESSALUD, inclusive trajeron expositores desde Colombia para decir que era malo este camino, sin embargo, nosotros apostamos por este proyecto vía APP, revisamos el proyecto anterior y nos dimos con la sorpresa que el principal obstáculo y la observación más grande a la petición era que se quería construir el Hospital IV en la avenida Anchoveta, pero no se decía donde se iban a ser reconstruido el Hospital I, pues no podía aparecer un Hospital especializado y desaparecer un Hospital de menor atención, por ello, empezamos la tarea de buscar un terreno pero a la vez definir que tipo de hospital menor necesitaba Nuevo Chimbote para cubrir la demanda de los asegurados pues el Hospital I también había quedado limitado y fue allí donde el Dr. Saravia que trabajaba en el área de inteligencia sanitaria hizo un excelente trabajo y sustentó la necesidad de construir el Policlínico de Complejidad Creciente que es una segunda infraestructura que va de la mano con la primera. Esto fue aceptado y se incorporó al proyecto de APP para construir un Hospital IV de Alta Complejidad y el Policlínico de Complejidad Creciente. Pero, necesitábamos mínimo, dos terrenos, uno ya definido, pero otro que no lo teníamos.
¿Allí apareció la opción de URBI?
Al primero que busqué fue al alcalde de Nuevo Chimbote, en ese entonces Juan Gasco Barreto y me dijo que habían 5 mil metros de donación de URBI y que me los podía entregar, pero a cambio quería el terreno que se ubicaba detrás del Hospital I, aquel que en realidad le pertenece a la asociación de jubilados. Al tener un alcalde de esta magnitud, se acabaron mis conversaciones, le dije: como puedes tu pedir eso. Luego entró Valentín Fernández y me ofreció su ayuda incondicional y lo hizo en una primera etapa y se lo agradezco, sin embargo, tampoco esperé su propuesta para que a cambio de los terrenos de URBI, ESSALUD condone la deuda de la Municipalidad de Nuevo Chimbote. Elevé la consulta a Lima, me dijeron que no era factible, pero si podían otorgar facilidades para el pago de dicha deuda.
¿Y nunca habló directamente con los dueños de URBI?
Hagamos un poco de historia. Cuando se vendieron los terrenos en favor de URBI, por ley, esta empresa debió destinar algunas áreas para equipamiento urbano, llámese salud, educación, entre otros. URBI donó 20 mil metros cuadrados a Essalud en el año 2009, pero increíblemente el doctor Jorge Baca Luna rechazó el terreno y lo hizo con documento. Cuando solicité la entrega al señor Casabone, alto funcionario de URBI, me enseñó el documento y me dijo como le vamos a entregar si ustedes ya lo rechazaron. Imagínense, Baca Luna, el que dice que es el gestor del Hospital IV, al que le quieren poner su nombre, ese señor rechazó los terrenos de URBI, con documento firmado, diciendo que el terreno no le sirve, porque tiene mucha arena, que el terreno no va a aguantar y que allí se ampliará el aeropuerto y que se chocarán con los aviones, etc, etc. Llámelo a Casanobe y le certificará ello.
¿Pero como se logró recuperar esos terrenos?
Con la fusión y el apoyo del alcalde Valentín Fernández. Se unió como Alcalde y salió a los medios y dijo que el proyecto del Hospital IV estaba en riesgo porque Interbank no cumplía con ceder los terrenos. Eso generó la reacción inmediata de Interbank, Casabone habló conmigo y me ofreció un terreno cerca a la playa. Me negué y le dije, Essalud necesita un terreno saneado, es decir, con agua, desagüe, luz, pistas, veredas, sino no aprueban el proyecto bajo modalidad de APP. Después de varias conversaciones, cumplieron su palabra. El terreno era de 20 mil metros cuadrados, pero nos dieron 10 mil metros, porque los otros 10 mil fueron entregados a otras entidades del Estado. Pero con 10 mil metros es suficiente para el Policlínico de Complejidad Creciente y estará una cuadra más allá del colegio Innova School. Por eso dígame, como me siento yo, cuando sale Loje diciendo que ha logrado destrabar el proyecto, cuando no ha hecho nada, que explique que significa destrabar, este proyecto ya estaba listo desde fines del año pasado, solo faltaba definir la etapa de inversión. Como quiere me que sienta cuando quieren poner el nombre de Baca Luna cuando el rechazo el terreno, la gente tiene que conocer la verdad. Por ejemplo, nadie dice, que tuvimos el apoyo de la Cámara de Comercio, de la Universidad San Pedro, de la Municipalidad Provincial del Santa, de la Defensoria del Pueblo, la Fiscalía en la persona de Nancy Moreno, hemos trabajado muy transparentemente sin condiciones. Y mire como es la vida, el mismo doctor Asmat que me denunció a mi y la Fiscalía archivó los cargos, no apeló, sin embargo, me dañó tres años la moral con el “habrían”. Y sabe qué, el padre de Asmat, que también es abogado, fue a Essalud a exigirle al administrador Rivera, que lo iba a sacar del proceso de investigación, porque también fue incluido, si es que dejaban ingresar a su sobrino que estaba postulando. El administrador me contó, no acepté y llamé inmediatamente a Nancy Moreno para decirle lo que pasaba y ella habló con Asmat, según tengo entendido. Está registrada la postulación del sobrino.
¿Que significa contar con un Hospital IV de Alta Complejidad?
De hecho que es un Hospital dirigido a resolver problemas de salud de mayor complejidad. Todos los asegurados de la Región tendrán que venir por aquí. Tendremos unidades que no existen en el Hospital III como Cuidados Intensivos Pediátricos, Cuidados Intensivos Gineco- obstetricos, intervenciones para neurocirugía, tendremos un resonador magnético; un nuevo tomógrafo pero de 120 cortes, no es de 64 cortes que tenemos actualmente. Tendremos litotricia que es un equipo que con ondas disuelven los cálculos renales, entre otras atenciones especializadas. A la par, habrá un Policlínico de Complejidad Creciente para cubrir la demanda de los asegurados en atenciones ambulatorias, de cirugía menor y algunas especialidades. Es el momento de trabajar muy seriamente con los especialistas, porque hay un problema a nivel nacional y necesitamos en los próximos dos a tres años que demore su construcción, se debe tener a los profesionales de salud con especialidad que deban cubrir las plazas existentes y no sea un elefante blanco.