Los agricultores del valle de santa se cansaron de esperar que el proyecto especial Chinecas asuma su responsabilidad de reconstruir los canales que han sido destruidos durante los huaicos que generó el “Niño Costero” y que no solo los ha perjudicado porque se ha arrastrado miles de hectáreas de cultivo, sino porque aquellas que quedaron intactas carecen de agua para concluir su período de cultivo.
Por ello es que una reunión de dirigentes y representantes de las diversas juntas de usuarios que existen en Chimbote, se tomó la decisión de “tomar los canales de Chinecas y exigir a la alta gerencia que resuelva de una buena vez este tema que los afecta considerablemente.
Los hombres de campo dejaron entrever la falta de capacidad de los funcionarios de Chinecas para llevar adelante esta tarea en la medida que los trabajos de emergencia han sido realizados, mayormente, por los propios gremios del sector agrario que no estaban dispuestos a esperar que despierte la burocracia para disponer el recurso hídrico.
Pero, como si les hubieran colocado una tachuela en el sillón, los funcionarios reaccionaron de inmediato y dieron a conocer a la prensa los trabajos provisionales que se habían ejecutado en esta últimas semanas, los cuales incluyeron un corte de 7 días del suministro de agua y que había permitido, por lo menos, retomar la distribución de agua tanto para el consumo como para los agricultores.
En tal sentido señalaron que se había solucionado un problema de filtración en un tramo de los canales y se había corregido la colocación de sacos por parte de los agricultores, de tal suerte que con ello se pudo suministrar el agua que esperan los hombres de campo para paliar esta situación, aunque es evidente que esta no es la solución.
Justamente, sobre la rehabilitación de los canales de chimecas, el gerente Gastón Barúa ha informado a los medio de comunicación que ya hicieron llegar su propuesta de daños a la compañía aseguradora que asciende a 28 millones de soles, por lo que esperan que en 20 días se tenga la respuesta y se lleve este caso a una conciliación a efectos de zanjar en una sola cifra que permita iniciar los trabajos de reconstrucción.
Precisamente, estos manejos burocráticos y paquidérmicos son los que exasperan a los agricultores, ellos no llegan a entender cómo es que un funcionario que ha llegado al cargo con todos los pergaminos habidos y por haber solo dependa del trabajo y la celeridad que le pueda poner la compañía aseguradora a la rehabilitación de los canales pues consideran que deberían contar con algún sistema de emergencia cuando se registren esta clase de daños.
Es evidente que la paciencia de los hombres de campo se termina, ello porque ya se cumplieron tres meses desde que se presentaron los huaicos y desbordes más destructivos que dejó el “Niño Costero” y hasta la fecha advierten que la infraestructura de Chinecas sigue en las mismas condiciones.
Lo preocupante es que el 60 por ciento del canal presenta grandes fisuras y grietas, habiendo cuatro quiebres que no han sido subsanadas de manera definitivo, son 2 kilómetros 600 metros de paños caídos que deben arreglarse si se quiere evitar consecuencias nefastas, han señalado los agricultores al evaluar la situación en la que se encuentra en este momento la infraestructura de Chinecas.
Esto ha sido materia de permanente información por parte de nuestro medio de comunicación, señalamos en su momento que los desastres se registraron entre el 14 y 15 de Marzo cuando se activaron las quebradas en las partes alta de Cascajal, desde donde se generó un huiaco que arrasó con todo lo que se hallaba en su paso en el caudal del entonces sequión “Sihiso” hoy convertido en un rio luego que generara un grueso cauce con la gran cantidad de agua y lodo que llegó y que ha obligado a las autoridades a colocar allí un puente Bailey.
Esta es historia conocida porque fue el centro de atención de la emergencia, el huaico que pasó por allí se llevó un largo tramo de la carretera panamericana norte e interrumpió el tráfico vehicular generando uno de los problemas más complicados de la última incidencia que nos dejó el fenómeno climático.
Esos mismos huaicos fueron los que generaron los daños más serios en las partes altas de la provincia, en la zona agrícola en donde no solo se llevó sembríos sino que arrasó con parte de la infraestructura hidráulica del proyecto Chinecas diezmando no solo la agricultura, que ya es bastante, sino poniendo en serios aprietos a las autoridades para garantizar el suministro de agua a un grueso sector de la población.
Lo que llama la atención es que estando ya tan lejos aquellos acontecimientos, habiendo trascurrido ya más de 90 días, hasta el momento persistan los problemas en la rehabilitación de los canales y ello porque en Chinecas no existe un plan de contingencia que pueda superar en el menor tiempo estas emergencias.
Asumimos que si los propios agricultores no hubieran reaccionado de inmediato motivados por la suerte de sus cultivos, la rehabilitación provisional de los canales hubiera tomado mucho más tiempo y se habrían generado más perdidas en el agro.
De allí que la indignación del hombre de campo de justifica, su desesperación los ha llevado a tomar medidas radicales como la anunciada toma de los canales para exigir a Chinecas que apure la rehabilitación y que se restablezca el servicio de suministro de agua como antes, es decir, en los volúmenes que realmente ellos necesitan y no solo con aquellos que ahora se brinda de manera provisional.
No hay que soslayar el hecho que esta emergencia nos ha cogido en los peores momentos de la gobernabilidad de Ancash, en tiempos que la justicia se ha llevado a los dos gobernadores que tenía la región y que ha encumbrado en el cargo al consejero de la provincia del Santa Luis Gamarra Alor que ha tenido el acierto de colocar al frente de Chinecas al ingeniero Gastón Barúa que es un técnico sobresaliente en estos temas.
Esperemos que ello ayude a aliviar el problema, si bien es cierto Barúa ya tiene poco más de un mes en el cargo, se requiere algo más de tiempo para poder sobrellevar esta situación y habrá que convenir que, como la canción del portorriqueño Luis Fonsi, tendremos que avanzar “pasito a pasito” en la rehabilitación de la infraestructura de Chinecas, por lo menos ya está en marcha y estamos convencidos que eso no habría ocurrido con quienes lo antecedieron en el cargo.