Recibió un balazo en la cabeza:
La violencia no deja a la ciudad. A solo una semana del execrable crimen de la joven Anabel Segura López, otro joven de 19 años de edad fue asesinado la tarde de ayer por un grupo de delincuentes que trataron de despojarlo de su teléfono celular y quienes no tuvieron reparos en dispararle a la cabeza cuando se resistió al atraco.
Los hecho ocurrieron en el camino a Tangay, cuando el estudiante del SENATI, Edwin Alayo Chávez, se dirigía a la parcela de sus padres para apoyarlos en las jornadas de trabajo como lo hacía todos los fines de semana.
Al ser interceptado por tres delincuentes armados, el joven trató de evitar el despojo de su teléfono y recibió un disparo en la cabeza. Los serenos que acudieron al llamado de los vecinos que escucharon los disparos, trasladaron al estudiante aún con vida al hospital Regional.
Sin embargo, los esfuerzos de los médicos por salvarle la vida se truncaron a las 4.00 de la tarde cuando el organismo del estudiante no resistió y falleció en la sala de Traumaschok. La Policía ha iniciado las investigaciones para dar con los culpables.