Ayer por carecer de agua clorada:
Clausuran sistema de abastecimiento de agua en mercado La Perla.
La Fiscalía de Prevención del Delito, la Red de Salud Pacifico Norte y la Municipalidad Provincial del Santa intervinieron la mañana de ayer los sistemas de ósmosis inversa que distribuye agua del subsuelo en el mercado La Perla, comprobando que la misma no contiene cloro y por consiguiente no es apta para consumo humano.
Por esa razón, se dispuso una clausura sanitaria de dicho establecimiento por tres días, hasta que hagan funcionar correctamente su sistema de captación de agua del subsuelo, independientemente de los resultados que se obtengan de los análisis bacteriológicos que se realicen a las muestras de aguas tomadas, para descartar la presencia de residuos fecales.
Justamente la intervención de las autoridades el día de ayer, fue consecuencia del informe de la Red de Salud Pacífico Norte que alertó a las autoridades que el agua que se viene obteniendo en el mercado La Perla no es apta para consumo humano ya que estaría contaminada con residuos fecales.
Por esa razón, la Fiscal Leyden Alvarado Olaya, la bióloga Cecilia Zavaleta de la Red de Salud Norte y Juan Villarreal de la Municipalidad Provincial junto a sus técnicos y funcionarios inspeccionaron el sistema de captación de agua del subsuelo y tomaron muestras del líquido elemento obtenido del caño de uno de los restaurantes que funcionan en el interior de dicho centro de abastos, para descartar la presencia de residuos fecales.
Jorge Luis Bayona Guio, responsable de la subgerencia de Fiscalización Ambiental de la comuna provincial tras someter a un análisis preliminar a la muestra de agua, descubrió que no estaba clorificada, lo que de por sí, se considera como no apta para el consumo humano.
“Corresponde realizar el análisis bacteriológico para determinar si hay residuos fecales. Estamos llevando las muestras a la Red de Salud para su análisis respectivo” subrayó.
Juan Villarreal Olaya, funcionario de la Municipalidad Provincial del Santa sostuvo que esta clausura sanitaria implica que no podrán utilizar las aguas recogidas del subsuelo hasta que funcione adecuadamente su sistema de osmosis inversa, pues a la fecha han tenido algunos inconvenientes técnicos que no han sido superados por el reciente cambio de directiva.