Laborioso y complicado triunfo:
El primero de Mejía fue un golazo.
En un partido que puso a sufrir más de la cuenta a los hinchas, el elenco de José Gálvez terminó ganando por 2 a 1 a Alfonso Ugarte de Chiclin, con lo cual se mantiene en la segunda ubicación de la tabla general al final de la quinta fecha de la Etapa Nacional de la Copa Perú.
La escuadra galvistas en varios pasajes del partido parecía no poder lidiar con sus propias limitaciones, pues los errores fueron casi constantes, sobretodo en el traslado y la entrega del balón, eso sumado a la baja actuación de algunos jugadores, hizo que el rival se muestre superior por momentos, pero gracias a Dios apareció la figura de Kevin Mejía, quien fue el destacado de la jornada al anotar dos golazos que salvaron a la franja de un magro empate.
La hinchada esperaba algo más de su equipo, por lo menos en los primeros minutos, pero el cuadro local no fue tan agresivo como se había planeado durante los entrenamientos previos al partido, y comenzó a sufrir porque no encontraba la fórmula para hacer daño al equipo de Chiclín, que como en Casa Grande apeló al juego colectivo, uno de sus mejores argumentos como lo mostró en la primera rueda, ayer no cambió mucho en su juego, al contrario parece haber mejorado ya que presionó siempre al equipo chimbotano, que no tenía salida limpia.
Por el sector derecho, Herrera no estuvo a la altura, apoyó poco en la salía del equipo, pero además casi siempre en su intento de trepar en ataque, terminó siendo víctima de la marca rival, no fue el mismo de otros partidos, no tuvo la misma velocidad ni intensidad en el retorno.
Mientras que, por la banda izquierda, Emerson Gonzales intentó más, tratando de complementarse con Jeferson Rodriguez, quien fue bien tomado por los defensores contrarios, y no tuvo mucho espacio para desbordar y tuvo que preocuparse más en tapar las salidas que en atacar.
Pero a pesar de las dificultades que tenía el equipo, sobre los 20’minutos, la jugada que se inició por la banda derecha, Erick Ángeles, quien hizo de puntero le cedió el pase a Portugal que apareció por el centro, este remató al arco pero la pelota le quedo a Kevin Mejía, quien merodeaba en el área, y fiel a su estiló porfió la pelota y la ganó, y con un remate colocado venció al portero Aranda, decretando la apertura del marcador para el cuadro local que parecía haberse sacado un gran peso de encima.
Contrario a lo que se pensaba, el partido se tornó más para el visitante que para los locales, que estaban arriba en el marcador, fueron los dirigidos por el ‘Pompo’ Cordero, quienes inquietaron el arco de Arroyo, quien tuvo dos intervenciones en la primera etapa, incluso una antes del gol de Mejía.
Los norteños atacaban de manera permanente, los centros cruzado al corazón del área fueron una constante, y un problema para los zagueros galvistas, quienes también parecían haber olvidado lo veloces que son los atacantes del cuadro de Chiclín, pero aún así, se dieron maña para alejar el peligro en varias oportunidades, hasta que a los 33 minutos apareció Emerson Salazar quien se encargó de transformar una falta penal en gol, fue el del empate y la hinchada enmudeció, porque el rival concretó lo que ya venía anunciando desde hace varios minutos, administrando mejor el balón, trasladando con mayor velocidad y precisión.
En esta primera etapa no hubo más emociones salvó el centro de Portugal para que aparezca Erick Ángeles pero este la mando afuera.
Para la etapa complementaria, los galvistas salieron con la misma oncena al campo, mientras que, en la visita, ensayaron una variante(Muñoz por Paredes) que intentó darle mayor control al mediocampo, y consiguieron su objetivo, porque tuvieron casi maniatado al elenco de la franja, que no encontraba la forma de llegar al arco contrario.
Arrelucea, diez minutos después, apostó por el ingreso de Sipiran en reemplazo de Angeles, quien había hecho poco en la primera etapa, y con Sipiran intentó tener mayor presencia en ataque, y no lo hizo mal, salvo que su lentitud jugó en contra a pesar de la actitud que tuvo para afrontar lo que restaba del partido.
Los visitantes continuaban con su mismo libreto, parecían tener bien leído a los chimbotanos, Portugal bien tomado no pudo hacer mucho, además no tuvo mucho despliegue, al parecer el trajín de Carhuaz le costó y ayer no fue el mismo de otras tardes, mientras Herrera continuaba perdiendo las pelotas en salida, aunque la defensa mejoró, pero no parecía alcanzarles, porque la velocidad de los delanteros rivales siempre crearon problemas, y la historia de Casa Grande de hace dos semanas empezaba a parecerse a la de ayer, porque fueron los zagueros los que soportaron el mayor peso del partido.
Pero si tenían bien tomado a Diago, y con las salidas bien tapadas, apareció Bruno Celis, quien lejos de su área, se animó a tomar la lanza, amagó salir por derecha y se limpió la cancha por el centro, cruzó la media cancha y lanzó el pelotazo para la corrida de Kevin Mejía, quien con potencia y velocidad le ganó a su marcador y con remate cruzado venció por segunda vez a Aranda, anotando el 2 a 1, a los 28’minutos de la etapa complementaria. La tribuna explotó y los galvistas parecían recobrar el alma.
Lo que vino después para la franja fue defender el resultado, no había otra, ante la poca precisión y efectividad, estaba claro que debían sumar gente en el mediocampo, por eso mandaron a Gutiérrez en reemplazo de Kevin Mejía, antes Jack de la Fuente reemplazó a Jefferson Rodríguez y la idea era sostener el resultado, o liquidarlo de contragolpe, pero en el juego, los visitantes parecían estar más cerca del empate, pero la defensa dejo todo, en realidad, todos se metieron al partido a tratar de defender con todo el 2 a 1, y así fue, Gálvez logró su tercera victoria consecutiva en esta primera fase de la Etapa Nacional y ahora irá a Lima a ratificar su presencia en el grupo de los ocho primeros.