Según el Instituto Nacional de Estadística, en el 2017, la pobreza monetaria en Áncash ascendió a 22.4%, por encima del 21.7% registrado en el 2016. Con esto, alrededor de 9 mil personas ingresaron a la situación de pobreza en la región. Este incremento se dio en línea con el aumento de la pobreza a nivel nacional, por primera vez en más de 15 años. En este sentido, es relevante analizar la incidencia de la pobreza en Áncash pues la pobreza en esta región supera el promedio nacional.
Evolución de la pobreza monetaria
Durante la última década, la pobreza se redujo en 12.5pp., al pasar de 34.9% en el 2008 a 22.4% en el 2017. Sin embargo, el 91% de dicha reducción se produjo entre los años 2008 y 2013, mientras que apenas el 9% se dio durante los últimos cuatro años. La clara ralentización en la disminución de la pobreza se debe principalmente a la desaceleración de la economía nacional y local. En ese sentido, cabe destacar que, de haberse mantenido el ritmo de reducción de la pobreza del período 2008-2013 (1.9 pp.), cerca de 75 mil personas que hoy son pobres, estarían fuera de la situación de pobreza.Â
Pobreza según ámbito
El incremento de la pobreza durante el último año se debió al incremento de dicho indicador en las zonas urbanas. Durante el último año, la pobreza urbana aumentó de 9.5% en 2016 a 13.7% en 2017. En tanto, la pobreza en las zonas rurales registró una fuerte disminución, al pasar de 41.3% en 2016 a 36.6% en 2017. Así, la región Áncash se convirtió en la segunda región con mayor reducción de la pobreza rural en el 2017, solo por debajo de Huancavelica.Â
EducaciónÂ
Un factor clave que determina la condición de pobreza es la educación. En ese sentido, una menor incidencia de la pobreza se relaciona con mayores niveles educativos. Así, del total de personas mayores de 17 años en situación de pobreza en Áncash, el 57% solo alcanzó educación primaria, el 37% logró completar secundaria y solo el 6% cuenta con estudios superiores. Por otra parte, para las personas no pobres se observa una distribución diferente. En este grupo, el 34% solo cuenta con educación primaria, mientras que el 66% alcanzó educación secundaria o superior.Â
Empleo
Según tipo de empleo también se aprecian notables diferencias. Por un lado, el nivel de formalidad entre los trabajadores pobres alcanza solo al 2%, mientras que asciende a 24% entre los no pobres. En tanto, según actividad económica, el 70% de la población pobre está empleada en actividades relacionadas al sector agropecuario. Por su parte, respecto a las actividades de la población no pobre, el 26% se mantiene ocupada en servicios y otros y el 25% en comercio y transporte, de modo que solo el sector agropecuario solo concentra al 30% del empleo. Por ello, es importante orientar los esfuerzos por mejorar la productividad en el sector agropecuario para reducir la incidencia de la pobreza en la región.