¡Es el colmo!
Directora de Jardín pide seguridad.
El colmo. Delincuentes por cuarta vez en menos de dos meses volvieron a ingresar a la institución educativa inicial Nro. 1608 “Banchero Rossi” en Nuevo Chimbote para robarse los útiles escolares de los menores y accesorios entregados por la Ugel-Santa
Este nuevo hecho se registró la madrugada del domingo y fue aprovechado por los delincuentes que sabían que el plantel no cuenta con trabajadores de vigilancia para trepar el cerco perimétrico e ingresar a robar.
La directora del plantel, Marlene Sánchez Chavez, señaló que en este cuarto los delincuentes violentaron las ventanas de dos aulas donde se guardaba material como palanas y picos entregados por la Ugel -Santa en la épocas de lluvias, además de útiles escolares.
La docente señaló que un vecino de la zona logró observar que era un sujeto quien intentaba subir por el cerco perimétrico, por lo que no se descarta que sean los mismos delincuentes que ingresaron anteriormente, por ello solicitó al alcalde de Nuevo Chimbote, vuelva reactivar la cámara de seguridad ubicada frente al plantel inicial.
“Antes había una cámara frente al jardín eso ayudaba mucho a que los delincuentes no ingresen, pero ahora que la sacaron hacen lo que quieren por acá, ya son cuatro veces que nos roban en más de un mes, como es posible que hagan esto con nuestro jardín que con tanto esfuerzo logramos sacar adelante esperemos que el municipio nos ayude en este pedido”, indicó.
De la misma forma, la directora, volvió a solicitar al director de la Ugel-Santa, Robert Iturria Huamán, que se designe a un trabajador de vigilancia al menos para el turno de noche, ya que es el horario que estos delincuentes utilizan para ingresar al plantel y robarse lo que encuentran.
“Ya nos hemos cansado pidiendo al director de la Ugel al menos un trabajador de vigilancia, ya poco a poco nos roban todo y nada pueden hacer por evitar eso, ojala que esta ves si nos consideren porque ya esto es tierra de nadie” indico.
Personal de criminalística de la comisaría Buenos Aires, llegaron hasta el jardín de niños para recoger las huellas dejadas por esos facinerosos y así poder identificarlos y dar con su paradero.