Fiscal pide 1 año y 6 meses de prisión:
La Tercera Fiscalía Provincial Penal Corporativa del Santa solicitó 1 años y 6 meses de pena privativa de la libertad en contra de María Emilia Corales Aranda, dueña de la perro pitbull que desfiguró el rostro de un menor de 11 años en el A.H “Los Balcones de Chimbote”.
El pedido está contenido en el requerimiento acusatorio que ha ingresado la Fiscal Angélica Bayes Antúnez al Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte de Justicia del Santa, acusando a María Emilia Corales Aranda del delito de lesiones culposas graves en aplicación a la ley 27596 “Ley que regula el régimen jurídico de canes” en agravio del menor Kevin (11), representado por su madre Regina Quezada Oré.
En la misma acusación, la representante del Ministerio Público solicitó a la imputada el pago de una reparación civil de 25 mil soles por daños y perjuicios causados, que es la sumatoria de 20 mil soles por daño personal y 5 mil soles por daño moral al menor agraviado.
Este requerimiento ha sido notificado a las partes procesales para que en un plazo máximo de diez días manifiesten su oposición y conformidad al mismo, lo que será discutido en una audiencia de control de acusación, antes de determinar si el caso pasa o no a la fase de juicio oral.
Según la imputación fáctica de la Fiscalía, el pasado 5 de febrero, el menor agraviado Kevin (11) se encontraba jugando cerca de su casa en la zona conocida como pampa de arena que es usada como área de deporte en el A.H “Los Balcones de Chimbote” (adyacente al P.J San Pedro).
En esas circunstancias, la imputada María Emilia Corales Aranda en forma imprudente dejó a cargo de sus menores hijos de 14 y 7 años, el cuidado de dos perros de su propiedad, ambos de raza American Pitbull Terrier, de nombre “Nala” y “Timoteo”, sin las medidas de seguridad suficientes.
Fue la perra “Nala” quien se soltó de la correa y al advertir la presencia del menor Kevin (11) que jugaba con un amigo de la misma edad, lo atacó en el rostro, ocasionándole diversas heridas y cortes en una de sus orejas.
Actualmente, la perra “Nala” ha sido entregada para su cuidado a una asociación de animalistas y el agraviado Kevin de 11 años, afrontó dos operaciones de reconstrucción de rostro con satisfacción y se recupera plenamente. Falta una intervención más, pero de carácter estético.