REPUESTO
Lo que sucede en la Policía es realmente terrible. Las capturas de efectivos policiales incurriendo en flagrante delito, como ha ocurrido anteayer que se detuvo a dos sub oficiales traficando con marihuana y otro sub oficial de la Policía Judicial cobrando una suma de dinero a los familiares de un detenido, solo suma a la lista de hechos negativos que si bien no tienen que ver con la institución sí atentan contra su buena imagen. Pero esto ya lo hemos dicho y señalado una y otra vez. Incluso, advertíamos que no existe un filtro idóneo y adecuado en las escuelas de formación que arrojan a jóvenes sub oficiales que no están preparados para ejercer el cargo. Sin embargo, en el caso de tráfico de drogas descubierto anteayer, lo que habrá que enfatizar es el caso del S.O. Juan Virhuez Cerruti, quien fue detenido en la minivan en la que se trasladaba con la droga a la ciudad de Casma, por lo tanto su caso es de flagrancia. Respecto al otro intervenido, suboficial Williams Kim Rodríguez Fajardo, el Coronel James Tanchiva ha señalado que ya en su proceso de formación en la escuela de Sub Oficiales fue sorprendido con drogas y por esa razón fue expulsado de esa institución, sin embargo, recurrió al poder judicial y un juez ordenó reincorporarlo, por lo que siguió en estudiando y en esas condiciones fue ungido como Sub Oficial, cargo que ha desempeñado hasta anteayer. Las preguntas que se nos vienen a la cabeza son pertinentes ¿Cómo es posible que un Juez haya ordenado reincorporar a la escuela de Policías a un alumno sorprendido con drogas? ¿No se daba cuenta ese magistrado el grave daño que se le hacía a la institución tutelar al obligarla a mantener en sus filas a un individuo que ya desde entonces manipulaba estupefacientes para su consumo o la venta pero que era un hecho tangible? ¿No es posible que un Juez envié a vestir el uniforme a un individuo que fue sorprendido con drogas? Miren ahora el grave daño que se le hace la policía cuando se sorprende a este mismo individuo traficando con drogas. ¿Cuantos otros pases habrá realizado este Sub oficial que se infiltró en la policía gracias un fallo judicial? Mucho ojo con esto, nos parece que es un hecho que amerita investigación.
AFLOJÓ
No cabe duda que el Gobernador Regional Juan Carlos Morillo es un político que tiene que defenderse con las uñas y las garras cuando lo atacan, por ello era consciente que no podía llegar ayer al seno del consejo regional con las manos vacías, algo tenía que ofrecerles a los consejeros para que le permitan seguir trabajando tranquilo. Y no lo pensó dos veces, puso en una bandeja las cabezas de los directores regionales de Educación y Salud aprovechando que han sido observados por la Contraloría General de la República y, en actitud demasiado desleal, fustigándolos por no haber cumplido las expectativas en los meses de gestión. Sin embargo, el Gobernador era consciente de las precariedades, por lo menos, de la Directora Regional de Salud, Katia Loyola, los medios de comunicación lo advirtieron a solos dos días de su designación y él ni siquiera les prestó la menor intención, los periodistas de Huaraz reclamaron públicamente porque la funcionaria les tiró la puerta en la cara cuando se acercaron a preguntarle por sus pergaminos profesionales ya que se sabía que no tenía los perfiles y menos la experiencia en cargos de confianza como para manejar una Dirección Regional. Ahora que es observada por la Contraloría sale a decir el Gobernador que no cumplió las expectativas y que han sido observadas. En el caso del Director Regional de Educación pudo defenderlo en la medida que las observaciones son de carácter formal y subsanables pero no lo hizo, prefirió llevar la bandeja al consejo regional para impedir que los consejeros hagan cuestión de estado contra su gestión.
FALLAS
Aun cuando la gerencia de obras de la Municipalidad Distrital de Nuevo Chimbote le cree a ojo cerrado al supervisor de la obra de alcantarillado para nueve urbanizaciones del distrito sureño que se viene ejecutando a la fecha, la realidad dice otra cosa diferente. Los vecinos, por intermedio de sus dirigentes, han recurrido a la Contraloría para dar cuenta de las deficiencias, Sedachimbote ha enviado un rol de observaciones y hasta el director regional de Trabajo señala que ha encontrado deficiencias al realizar un operativo que personalmente encabezó. Muchos no pueden equivocarse y una prueba de ello es la fractura de la pierna que sufrió una vecina gestante que estuvo a punto perder su bebé cuando la mototaxi que la trasladaba se volcó porque no existen señales de peligro que le impedían pasar por una calles que estaban con terreno removido. Esto es grave y lo mejor será que el gerente de obras tome sus precauciones porque al final lo señalarán con el dedo acusador si es que sucede algo más grave.