La ultima semana fue sumamente movida en la Universidad Nacional del Santa como consecuencia de la protesta promovida por grupos de estudiantes que han debido llegar al extremo de hacer acciones públicas en la medida que no encuentran la respuesta y la atención que deberían tener en su condición de estudiantes.
Las protestas fueron realizadas por estudiantes de las escuelas académicas de Medicina y de Biotecnología, quienes lamentaron que el rector Sixto Díaz Tello no atienda sus reclamos y que lejos de responder los requerimientos netamente académicos que realizan siempre responda en otros escenarios que se trata de una protesta política.
Los primeros que se vieron precisados a salir a las calles fueron los estudiantes de Medicina, quienes no solo realizaron un plantón en el frontis del rectorado si no que llegaron hasta la Plaza de Armas en donde el rector tomaba parte en una actividad oficial de la fiesta de San Pedrito mostrando carteles en la que pedían a su máxima autoridad que los atienda y escuche.
Muchos diríamos que no es mucho pedir, empero, es evidente que la autoridad no tomó de buen agrado esta reacciónÂÂ estudiantil, sin embargo, hay que tener en cuenta que alguien obtiene lo que se busca, la indiferencia del rector a un problema medular para los estudiantes debería tener un correlato en el dialogo, pero este no existe.
Los alumnos han explicado a la prensa que ellos no vienen reclamando un tema nuevo pues ya antes se ha demandado por parte de otra promoción, es una problemática antigua que las autoridades no quieren atender como son los convenios con los organismos de salud para que los egresados de esta carrera profesional puedan contar con el internado que obligatoriamente deben realizar para poder obtener su título profesional.
Ellos han señalado que la primera promoción no pudo postular a EsSalud, pues todos las universidades que tienen Escuela de Medicina terminan su ciclo de externado los primeros días de noviembre para que puedan pasar el examen de EsSalud, sin embargo, el director de escuela, el médico, Carlos Sánchez Reyna, renunció de manera irrevocable al cargo por asuntos personales, pero el consejo universitario le ha ampliado el cargo hasta el diciembre a pesar de su negativa de continuar.
Esto los perjudica porque el nuevo director tenía que hacer la restructuración de los horarios para que se pueda concluir en el plaza señalado y o tener los mismos problemas que la primera promoción, sin embargo, la actitud del Rector no soluciona el tema.
“Solo nos interesa a nosotros los alumnos realizar nuestros internamientos en EsSalud y Minsa”, han señalado los quejosos y todo indica que no solo no es mucho lo que demandan sino que exigen que se atienda el caso porque es su derecho y en esto tienen absolutamente toda la razón.
Pero apenas dos días después de esta protesta, salieron los estudiantes de la escuela de Biotecnología, quienes realizaron una bulliciosa protesta denunciando que se encuentran sin equipos ni reactivos para sus prácticas en los laboratorios que lucen totalmente deteriorados.
Señalaron que actualmente solo cuentan con un laboratorio de investigación donde ingresan más de 30 alumnos por clase, haciéndose imposible el buen aprendizaje, además actualmente no cuentan con reactivos para sus prácticas, hecho que los ha llevado a utilizar sustancias ya vencidas o agruparse para comprarlas porque sus precios sus muy elevados.
Agregaron que no cuentan con equipos ni objetos de análisis vitales como son Shaker, cabinas de bioseguridad, incubadoras, pipetas, placas Petri, matrices entre otros, como tampoco se les asignan docentes especializados de carrera a pesar que en muchas ocasionesÂÂ han solicitado la contratación de estos catedráticos.
Al igual que los alumnos de medicinas, estos estudiantes mostraron los cargos de oficios y solicitudes que han remitido al rector y que, lamentablemente, han caído en saco roto porque no se solucionan los problemas y deben estudiar en estas condiciones.
Hay que hacer la salvedad que los medios no informan estas quejas de Biotecnología por primera vez, ya antes lo hicieron y si se mantienen en esta medida es porque ciertamente el rectorado no resuelve estas contingencias que tienen asidero en la medida que una carrera técnica como Biotecnología no puede desarrollarse sin contra con laboratorios completos.
No sabemos realmente como enfrenta la Universidad las demandas de sus estudiantes pero todo indica que no lo están haciendo nada bien, por el contrario, la población debe enterarse de esta manera la problemática de la que se considera es la primera universidad pública de la ciudad.
No se puede soslayar que hace solo una semana, la Universidad Nacional del Santa ha inaugurado y bendecido las nuevas y modernas instalaciones que ha construido en el Campus 2. Una envidiable infraestructura que debe ser una de la más importante en todo el norte del país y que en breve debe estar equipándose u entrando en servicio.
Sin embargo, lo que preocupa es que si las autoridades de las UNS no pueden manejar un problema como los convenios con las entidades de salud, no sabemos que podrán manejar la nueva dimensión que tendrá esta escuela universitaria.
El Rector debe entender que escuchar a los alumnos no solo es parte de sus obligaciones, es una necesidad para conocer desde adentro cuales son sus necesidades, cuáles son sus carencias, como marchas los funcionarios de confianza que ha destinado en esa escuela y, finalmente, cuales son las fortalezas y debilidades de su institución en la medida que los alumnos son los llamados a describir lo que realmente pasa al interior.
Se equivoca el rector cuando aplica una política de puertas cerradas a los alumnos o sus dirigencias, es imprescindible que cambie de actitud porque al fin y al cabo atender los reclamos de los alumnos es un deber de su despacho de allí que debe dejar de lado esa suerte de dialogo extraviado que se percibe en la Universidad del Santa y convocar a los quejosos para resolver de la mejor manera los requerimientos. Esperemos que pronto nos informen como se han resuelto estos inconvenientes.