Su cara lo dice todo.
A la luz del resultado, sin duda que la inclusión de Jesús Álvarez en el comando técnico galvista no resultó nada beneficiosa, por el contrario el planteamiento inicial es de su absoluta responsabilidad. El equipo no jugó como debía hacerlo y se demoró en exceso para reemplazar a Charun.
Álvarez asumió el jueves a solo 48 horas del partido y creemos que con ese lapso de tiempo es muy difícil llegar y dirigir, pero él lo hizo y poco o nada influyó, porque se vieron los mismos errores que cuando se jugó con DIM.
Claro pero ahora se sumaron hechos puntuales como la deficiente actuación de varios de los jugadores como Juan Rojas Requena y Jesús Torres, que estuvieron tan erráticos que entregaban al rival y fue una constante.
En su segundo partido quedo demostrado que Chávez, por la para que tuvo no está para jugar. Está lejos de un buen nivel competitivo. Aquí no hubo altura, pero no apareció por ningún lado. Su aporte es nulo y está en deuda.
Anoche se supo que el partido del miércoles era en la noche en Huaraz que ayer sufrió una torrencial lluvia. Si las condiciones climáticas son esas será mucho más complicado para José Gálvez el partido de la cuarta fecha.
La realidad indica que la situación es dificilísima y que esta derrota ante el Sport Áncash es la estocada final para la eliminación en solo tres fechas de la Etapa Nacional.
ESTADIO
Anoche se supo y nuestro Diario tienen su poder la carta que el administrador del estadio Wencesalo Garibay envió a Pablo Paiz anunciándoles que cobraría 500 soles por el alquiler del estadio.
Garibay Anyosa estuvo durante la semana que paso declarando sobre el tema incluso a nuestro Diario le dijo que el cobraba por el alquiler del estadio 150 soles, porque debía cobrar 5 por ciento de la taquilla.
Garibay Anyosa le dijo a este Diario que él quería cobrar y anoche lo hizo los 350 soles por la rotura de la puerta de un almacén cercano al camarín visitante. Esa puerta fue rota cuando jugo el Áncash aquí por la final departamental, por un jugador de ese equipo. Garibay envió una carta a la Lidefa pero no dijo que quien rompió la puerta fue el jugador del Sport Áncash. Anoche los 350 soles se los han descontado a José Gálvez.