Nos dejó “el negro”:
Tanto como un inmenso dolor, la muerte de Víctor Chávez Toledo produce un profundo vacío en la historia de Chimbote, pues con su partida se cierra un ciclo de más de sesenta años del arte fotográfico.
Desde mediados de la década de 1950, “El Negro” Chávez, capturó con sus cámaras, no solo la vida cotidiana de Chimbote sino también el despertar de un nuevo emporio industrial.
Sus fotografías ilustraron las primeras ediciones del desaparecido Diario “El Faro”, posteriormente hicieron lo mismo en la página de Chimbote, que todos los días publicaba en el Diario La Prensa, su amigo Wilfredo Peláez Gularte. Fue así como se hizo conocido.
A comienzos de la década de 1960, cuando se inició el boom de la pesca fue contratado por Luis Banchero Rossi. El gran empresario le pidió que fotografíe toda su flota pesquera y sus plantas industriales, con faenas incluidas.
Posteriormente, fue fotógrafo oficial de SIDERPERU, por más de veinte años. Se hizo experto en foto murales. Sin exagerar, se calcula en más de 500 mil las vistas que conforman su valiosa fototeca.
Víctor Chávez Toledo murió ayer, en su domicilio en la Urbanización Buenos Aires, Nuevo Chimbote, a la edad de 81 años de un infarto, cuando dormía
Cada vez que uno de sus amigos le pedía una copia fotográfica, el preguntaba muy cortésmente. “ ¿Quieres un copia a color o en blanco y Chávez?”. Querido negro, descansa en paz. (CCLR)