Tampoco hay roturas de tuberías:
Río Rímac luce bastante limpio.
Lima, abr. 21.- En un 90% se redujo el arrojo de basura, desperdicios y desmonte al río Rímac por parte de la población y de las fábricas ubicadas en inmediaciones del Río Hablador, informó el presidente del directorio de Sedapal, Francisco Dumler.
“Se ha reducido en casi 90%, es decir no llegamos a más de una tonelada de basura y de escombros. Todas estas empresas que se dedican a a sacar material de cantera y están en los lechos de los ríos y que enturbian el agua no están en este momento operando”, subrayo Dumler.
Indicó que Sedapal ha podido confirmar esta reducción al verificar las esclusas de La Atarjea, donde ya no se observa la gran cantidad de bolsas de basura, maderas y todo tipo de residuos como era habitual antes de la cuarentena.
Dumler dijo, asimismo, que ha disminuido la rotura y el colapso de las tuberías de agua y desagüe porque la cuarentena ha generado una reducción del tráfico de vehículos pesados.
Explicó que normalmente los camiones pesados circulan por zonas que no tienen pistas preparadas para soportarlos y ello hace que las tuberías se deterioren.
Igualmente, señaló que aquellas personas irresponsables que arrojan basura a los buzones del alcantarillado, ya no pueden hacerlo, porque es una práctica que ejecutan generalmente de noche, cuando nadie los puede ver.
El alto funcionario de Sedapal dijo esperar que este hecho se mantenga en el tiempo y, una vez que se levante el estado de emergencia, no se vuelva a contaminar el río Rímac.
“Hace 50 años, en este río había una gran cantidad de camarones y otras especies acuícolas. Son cosas que ya no hay”, puntualizó al indicar que el cuidado y la preocupación por nuestro río debería mantenerse más allá de la cuarentena.