ERRADOS
En las redes sociales ha circulado en estos días los comentarios que se hicieron en un programa televisivo argentino a propósito de los efectos que viene dejando el Covid 19 en la economía regional, es decir de todo el continente. Mostraron para ello un gráfico de barras en el que se observa los niveles que ha afectado la pandemia a los diferentes paises y señalaban que Argentina era el segundo país que más ha experimentado el golpe en su economía y mientras se explayaban en comentarios sobre esas consecuencias advertíamos que en ese mismo gráfico el país más golpeado era Perú y que el nivel de afectación era casi el doble de la economía argentina, lo que nos decía de los graves padecimientos de los connacionales. Por ello cuando llegaron a comentar el caso de Perú los periodistas y comentaristas gauchos se sorprendían y se lamentaban, se mostraban solidarios con los peruanos porque ya se imaginaban como la estábamos pasando pero se mostraban sumamente extrañados porque entendían que estos resultados en la economía eran contundentes porque Perú era el país que había adoptado medidas extremas de confinamiento, casi radicales que motivaron la paralización de su aparato productivo pero que a pesar de ello no se manifestaba lo mismo en las cifras de la salud, pues es el país que tiene más muertos por millón entre todos los países del mundo. ¿Cómo puede explicarse esto? Le preguntaba la periodista a la comentarista y la respuesta fue contundente. “hicieron muy mal las cosas”, respondió, tanto en lo que compete al gobierno (sus medidas equivocadas con marchas y contramarchas) como en lo que compete al ciudadano de a pié. Y este último aspecto hay que remarcar que los malos hábitos y las malas costumbres nos han llevado a este lúgubre panorama, no es posible que después de todo lo que se ha dicho y lo que se ha vivido, exista gente que siga pensando en fiestas y cuchipandas cuando estamos en una emergencia cuya secuela es la muerte. Hay quienes no le dan importancia al tema, entonces allí están las consecuencias, una pandemia que se ha prolongado seis meses y nos ha llevado a niveles brutales de afectación de la economía de las cuales será difícil salir.
OTRA VEZ
Ahora bien, en los últimos días hemos advertido la tendencia a la baja de las estadísticas de contagios y fallecimientos. Por ejemplo, a nivel nacional las cifras han caído de un promedio de 5,800 contagios diarios a 3 mil y pico, mientras que los fallecimientos descendieron de 150 a 50 por día. En el caso de nuestra región Ancash los números han descendido de 300 ó 400 contagios diarios a 150, mientras que la cantidad de fallecimientos descendió de 20 ó 30 hasta dos a cinco que se registra en esta última semana. Es evidente que existe una retracción y estamos en el descenso del famoso pico que los especialistas pensaban que iba a llegar entre julio y agosto, pero se ha prolongado por la irresponsabilidad de mucha gente que no respetó las medidas sanitarias. Sin embargo, este nuevo panorama no debe dar lugar al conformismo, más aun cuando ello ha generado que nuestra provincia por fin dejó la cuarentena focalizada, consecuentemente, hay que ser conscientes de esta mejoría y no podemos distraernos, no hay que bajar la guardia, debemos respetar religiosamente las normas de prevención, hoy más que nunca que se ha alcanzado un control de la enfermedad. Cada quien debe tener en la cabeza que el lavado constante de las manos, la desinfección con alcohol de 70 grados o con gel alcohólico y el distanciamientos son las herramientas que hay que seguir todos los días. Es la nueva forma de convivencia con el virus hasta que llegue la vacuna, es posible conseguirlo, solo es cuestión de voluntad.
JUSTO
El pasado fin de semana, la Jefatura de la Policía Municipal rindió un sentido homenaje a cinco de sus miembros que han fallecido en esta pandemia a consecuencia de la enfermedad y en cumplimiento de su sacrificada labor. Cierto es que en la medida que hemos transcurrido la fase más crítica de la pandemia con resultados nefastos, es momento de tomar lista y recordar a todos aquellos que nos dijeron adiós por esta maldita pandemia. Un reconocimiento para los policías municipales y un aplauso para los jefes de esta repartición que convocaron a sus familiares para rendirles el justo homenaje que se merecen. Compartimos el dolor que los embarga.