Política

ACTUALIDAD Y POLÍTICA

HAMPON

El último fin de semana efectivos de la Policía capturaron a los integrantes de una peligrosa banda de asaltantes que se ocultaban en una vivienda del P.J. San Pedro, entre los cuales se encontraba Bryan Hermnio Casahuamán Zapata (a) “Chuqui”. La presencia de este hampón nos llamó la atención porque nos trasladó a un evento delincuencial bastante delicado como fue el asalto al comerciante de joyas Noé Augusto Peña Ruiz, ocurrido en julio del año pasado, cuando fue despojado nada menos que de 120 mil soles en joyas y 24 mil soles en efectivo así como de la pistola que usaba para protegerse. En esa oportunidad, el joyero señaló que, con ayuda de las cámaras de seguridad se había identificado a los cuatro sujetos que lo asaltaron y hasta al empleado de su joyería que fue el que dio la información a los delincuentes del traslado de las joyas y el dinero, incluso, este caso se tornó en un escándalo porque un Policía le exigió 5 mil soles para detener a los delincuentes “porque había una fuerte suma de dinero de por medio”, denuncia que dejó muy mal parada a la Policía. Lo cierto es que estas divagaciones de la Policía y el interés por el dinero permitieron que este delincuente Bryan Casahumán fugara a Chile, en donde, aparentemente, hizo la misma vida delictiva y este año retornó a nuestro país fugandose de las autoridades sureñas. Ya en nuestra ciudad volvió a la vida delictiva, es un sujeto habitual en el delito, y se integró a una banda conocida como “Los sanguinarios del valle” que se dedicaban al asalto y robo y utilizaban como señuelo a una menor de edad a la que involucraron en sus mafiosas acciones. Lo curioso es que el viernes ha sido detenido y entre sus pertenencias se le ha decomisado una pistola, que es la misma arma de propiedad del joyero Noé Augusto Peña Ruiz que se la despojó en el asalto de Julio del 2019. Ello quiere decir que este delincuente siguió realizando todo este tiempo actividad delictiva con el arma que le despojó al comerciante de joyas. Esperamos que con toda esta evidencia envíen por muchos años a este sujeto que, a pesar de su corta edad, es un peligro latente para la sociedad.

Joyero Noé Augusto Peña Ruiz.

VACUNAS

Cuando escuchamos las noticias la semana pasada acerca de una niña que había sido diagnosticada con difteria nos sorprendimos sobremanera. Ello porque la difteria es una enfermedad que ha desaparecido hace décadas, mejor dicho ha sido controlada por la medicina a través de las vacunas que OBLIGATORIAMENTE se colocan a todos los niños cuando nacen. Los padres de familia saben que existe un cronograma de vacunas, tanto en el Minsa como en Essalud les entregan unas tarjetas en las cuales figuran las vacunas y las fechas en las que deben llevar a sus niños para que los inmunicen, entre ellas la pentavalente que es la que protege de esta enfermedad. Si la niña que infortunadamente ha fallecido en Lima se ha contagiado con la Difteria es porque no recibió la vacuna, no existe otra razón, de allí la importancia que tiene este proceso que solo toma los primeros años de vida de los niños. Ahora que enfrentamos una pandemia por el Covid 19 para la cual se busca una vacuna, es una verdadera lástima que aparezcan esta clase de enfermedades, las autoridades de salud se estaban preparando para frenar el dengue que es un mal endémico pero aparece este caso de difteria que resulta incomprensible. Ya las informaciones de los hospitales en Chimbote dan cuenta de la llegada de padres de familia que llevan desesperados a vacunar a sus hijos con tarjetas en las que figuran los retrasos en la aplicación de estas vacunas. Esto no debe suceder, la responsabilidad de los padres en la protección de sus hijos es elemental para que no ocurran casos como los que ha sucedido con la niña de cinco años en Lima.

ATROPELLO

Es lamentable la muerte de una criatura de solo dos años y 8 meses de vida, quien fue atropellada junto a su madre y su hermanito menor por un automovilista que se dio a la fuga. Esto ocurrió en la avenida Pardo, frente a la iglesia Fuente de Vida y no es la primera vez que ocurre un accidente en este lugar y tal parece que no será el último. Hace mucho tiempo se ha señalado la necesidad de colocar allí un semáforo porque no solo transitan personas sino que algunos vehículos ingresan por esa intersección y se registran choques lamentables porque no solo la oscuridad conspira para ello sino algunos choferes que manejan a excesiva velocidad o bajo los efectos del alcohol. Las autoridades deben adoptar medidas porque, de lo contrario, se pueden registrar otros hechos que lamentar.