Tenía 50 por ciento de los pulmones seriamente dañados
Con el 50 por ciento de los pulmones seriamente comprometidos así llegó al hospital regional Eleazar Guzmán Barrón, Pablo Ramón Baltazar (60), un curtido buzo que se contagió de la Covid-19 mientras trabajaba. Hoy, después de estar 28 días internado, 24 en la Unidad de Cuidados Intensivos, fue dado de alta.
Pablo Ramón, es padre de tres hijos y abuelo de cinco nietos y en el mundo del buceo es conocido como “Ronco”. Toda la vida se ha dedicado a este oficio que le ha permitido sumergirse en el mar hasta 27 brazadas.
El pasado 16 de junio, su hijo lo ingresó al hospital y debido a su severo estado de salud fue inmediatamente derivado a la Unidad de Cuidados intensivos donde tuvo que ser entubado para recibir ventilación mecánica.
“Cuando me agravé y mi prueba de Covid-19 salió positivo, mi hijo me trajo al hospital, en el camino le dije ‘ya fui, cuídense los tres’, mi hijo me dijo ‘no viejo, no digas eso’”.
En UCI, el equipo multidisciplinario de profesionales batalló codo a codo junto a Pablo Ramón para lograr que venza a la enfermedad y pueda retornar con los suyos. Hoy, tras volver a nacer, agradece a Dios por darle una segunda oportunidad y al personal que lo atendió y le dio ánimos para seguir en pie de lucha.
“Hay muy buenas persona en UCI, gente buena que me ayudó, recuerdo mucho a mi fisioterapista, César, un buen chico que me ayudó mucho, a todos gracias y a la gente le digo que el Covid-19 no es un juego, es cosa seria, no es broma, usen dos mascarillas y en lugares con mucha ente pónganse además protector facial, yo logré vencerlo y soy un ganador más de Dios”, aconsejó nuestro guerrero.