En Hospital La Caleta:
Nathaly Loyola Velásquez (29), es madre por segunda vez y pese a haber llevado sus controles de forma normal y sin ninguna complicación, debiendo alumbrar por cesárea igual que su primer parto; se le programó su operación, para el pasado 12 de setiembre, sin embargo, al parecer, al realizarle el corte pélvico se rompió, por lo tanto, el bazo tuvo que ser retirada.
Según su historia clínica en el Hospital La Caleta, la joven madre ingresó a sala a las 11 y 46 de la mañana. Su niña nació a los pocos minutos. Luego de realizar el corte pélvico para retirar al bebé de su vientre, empezó a presentar una taquicardia, que fue controlada por los médicos en sala.
Posteriormente, la paciente fue estabilizada y pasó a su habitación, donde le sobrevino otra taquicardia, la misma que también fue controlada. Desde ahí empezaron a realizar los monitoreos para determinar las causas de estos problemas.
Su hemoglobina de un día para otro bajaba, llegó el día martes 14 de septiembre a 5.6, por ello, se dispuso sacarle una ecografía en la se pudo observar sangre en su interior. Los médicos pidieron la intervención del cirujano, quien recomendó que se le explore para frenar la hemorragia y determinar el origen del sangrado, ahí se percatan que sus órganos estaban adheridos, y en una posición anormal, a un costado de su útero. Entre estos órganos se encontraba el bazo roto, presuntamente a raíz del corte que se le hizo en la parte pélvica.
El jefe de Ginecobstetricia, Javier Saldaña, deslindó cualquier tipo de mala intención en la práctica de la operación. Dijo que no pudo predecir la adherencia de algunos de sus órganos que estaban ubicados en la parte donde se hizo la incisión para su cesárea, sin embargo, se ha iniciado una investigación médica.
En tanto, la paciente fue aislada. Debido a su estado de salud, se encuentra estable y es monitoreada constantemente. Su pequeña se encuentra con ella. También es monitoreada por el Departamento de Neonatología.
Cabe mencionar que, según los médicos, algunas personas que son sometidas a intervenciones quirúrgicas o algunas enfermedades hacen que los órganos se adhieran, y no puede ser visto con facilidad en los estudios que se realizan.
Este caso en particular está en investigación. Se sabe que la paciente presentaba intervenciones quirúrgicas con anterioridad, lo que puede haber generado este tipo de situaciones que no fueron advertidos en sus controles prenatales.