Por: Ricardo Sevillano Valderrama (*)
Queridos amigos:
Estando a puertas las elecciones municipales y regionales, y el principio de la realidad nos dice que si no se elige a gobernantes con probada ética y cariño por nuestra región o ciudad, todo seguirá igual o peor, debemos de no permitir jamás que suceda lo que hemos sido testigos de horribles horas de violencia criminal, como también: gobernadores, alcaldes y otros personajes “corruptos”, y para eso debemos estar preparados a elegir a personas, con DECENCIA, ÉTICA Y HONESTIDAD.
Los candidatos actuales no tienen qué decir que son honrados y honestos, sino mostrar que a lo largo de su vida lo han sido. No decir que aman a su ciudad, región o país, sino mostrar que lo han venido haciendo.
Al elegir a un candidato tenemos que tener presente lo que más le conviene al futuro de nuestra ciudad, región o país, nos atañe directamente y tendrá una influencia trascendental en la vida de cada uno de nosotros, sobre todo de las nuevas y futuras generaciones. Por lo tanto, respetados ciudadanos:
¡“No te venderás por un plato de lentejas”!
A LOS CANDIDATOS LOS INVITO A TENER EN CUENTA SOBRE LA HONESTIDAD
– La persona íntegra vive lo que habla y habla lo que piensa.
– La sinceridad consiste en decir toda la verdad, a quien corresponde, de modo oportuno y en el lugar adecuado. Decir la verdad no es un irrespeto.
– La persona honesta es, además auténtica. Hay coherencia entre lo que hace y l que debe hacer de acuerdo a sus principios. Vive auténticamente.
– La persona que miente (por engaño, exageración, precipitación al hablar, etc.), se hace daño a sí misma. La mentira es autodestructiva: siempre se paga.
– Mentir para dañar a alguien, robar al pobre, hacer fracasar a alguien voluntariamente, son injusticias de grueso calibre.
– Ser honesto-justo, es dar a cada uno lo suyo, lo que corresponde: salario, derechos, reconocimiento, integridad.
– La falta de integridad se suele justificar diciendo que todos actúan así. Es necesario vivir según los principios, aunque esto suponga ir “contra la corriente”.
– Ser honesto es ser transparente; es necesario desprenderse de las máscaras (agresividad, apariencias) que esconden tras de su inseguridad o miedo.
– Una falta de sinceridad, de veracidad, es aparentar una imagen que no corresponde con la realidad, por ejemplo, aparentar virtudes que no se tienen (ser hipócrita).
– No se preocupe demasiado por “el qué dirán”, aparte de mostrar inseguridad en uno mismo es una falta de sencillez. También lo es justificarse o excusarse.
Queridos amigos:
– Nuestro futuro depende de que sepamos elegir, que elijamos buenos programas de gobierno e inversiones para nuestra ciudad. Exigir trasparencia! (RSV)
– Tan importante como el dinero es también una buena gestión…! (RSV)
– Hábiles hay muchos.. honrados somos pocos…! (mi padre)
Mayo 2022
(*) Ciudadano libre, honrado y de buenas costumbres