Salud regional:
El electo consejero regional por la provincia del Santa, Alexander Peláez Vera, no ha dudado un solo instante, ni mucho menos le ha temblado la mano, para denunciar penalmente al gobernador regional Henry Borja Cruzado ante la Fiscalía Corporativa de la Provincia del Santa. La denuncia es con relación a los hechos que vienen sucediendo en la conducción de la Red de Salud Pacífico Sur como resultado del frecuente cambio de director, tanto así que, en lo que va de transcurrido el presente año, ya son ocho los funcionarios que han desfilado por ese cargo.
Como lo adelantamos en nuestro editorial de ayer, este es un problema ya insostenible, una rémora que le hace mucho daño a la Sub Región Pacífico, y cuya responsabilidad, en efecto, recae directamente en la cabeza del gobierno regional. Es él quien dispone y oficializa los cambios. Por tanto, es él quien debe asumir las consecuencias.
Los presuntos cargos en los que habría incurrido el gobernador regional son abuso de autoridad y omisión de funciones en agravio del Estado. Según ha argumentado el electo consejero regional, el sucesivo relevo de directores genera una gran inestabilidad en esa importante dependencia; y no asolo eso ya que lejos de ser una solución es más bien motivo de un gran malestar. Esto último se puede advertir al comprobar la deficiente calidad del servicio que brindan los centros de salud a una población de 300 mil habitantes que residen en el ámbito de la Sub Región Pacifico.
No es ninguna novedad que cada nuevo director tiene a su vez la facultad de nombrar a un nuevo administrador y otros funcionarios de confianza, lo que ocasiona retrasos en los procesos logísticos y sobre todo en la atención al usuario. Cada vez son más largas las colas de pacientes que duermen en los pasadizos del hospital regional para conseguir una cita médica y del mismo modo para obtener medicinas en la farmacia del nosocomio. ¡Cuánta razón tienen quienes afirman que la medicina a veces resulta peor que la enfermedad!.
Es innegable que esta falta de capacidad, de la que somos testigos a diario, repercute en la baja calidad de la gestión que realiza el gobierno regional de Ancash en un tema de tanta gravitación como es la salud. La causa no es otra que el factor humano y sin ir muy lejos así lo grafica otro hecho ocurrido en plena lucha contra la pandemia.
Como se recuerda, ante la falta de capacidad y ante los hechos de corrupción que menudearon en aquella ocasión, particularmente en Ancash, el gobierno central se vio en la necesidad de disponer que sea directamente el Ministerio de Salud, y no los gobiernos regionales, quien asuma la lucha contra la pandemia.
En una circunstancia en la que todas las redes de salud del gobierno regional dispusieron de suficientes recursos económicos y materiales para enfrentar con éxito la pandemia, lamentablemente se hizo lo contrario. El millonario presupuesto que envió el gobierno central para asumir esta lucha, fue objeto de malos manejos que a la larga incidieron en el incremento de las cifras de contagios y fallecimientos.
En un reciente plantón de protesta, los miembros del cuerpo médico y trabajadores de la Red de Salud Pacífico Sur han coincidido en señalar que detrás de cada cambio de director existe un claro interés en direccionar la compa de insumos y medicamentos así como en la contratación de servicios. Esa sería la razón por la que se cambia funcionarios con tanta frecuencia. Un director que no cumple al pie de la letra con este direccionamiento, al día siguiente ya está en la calle.
Cuando falta dos meses y medio para el inicio de una nueva gestión regional, ya nada bueno ni positivo se puede esperar de la gestión saliente. Como siempre sucede en estas circunstancias, el poco tiempo que resta solo puede servir para rascar el fondo de la olla presupuestal y hacer caja para consolar la despedida. La salud de la población es lo que menos interesa. A estas alturas, la Sub Región Pacífico ya está con sus redes en remojo.