Editorial

ESTUDIOS Y EXPERIENCIA NO ES SUFICIENTE

¡Ojo, señor gobernador electo!

Lo que ha manifestado el gobernador regional electo, Fabián Koki Noriega Brito, con relación al nombramiento de quienes van a ser sus funcionarios de confianza, nos ha llevado de manera  inevitable a recordar experiencias ya vividas y, como bien lo afirma el dicho popular, es mejor poner el parche antes que salte la pus.

Cuando en el 2017 el  Ing. Edilberto Ñique Alarcón asumió la gerencia general del Proyecto Especial  Chinecas él ya era un profesional  de  larga y reconocida trayectoria en la administración pública nacional, concretamente en la gestión de proyectos de irrigación. Venía de ocupar nada menos que la gerencia del proyecto liberteño Chavimochic, cargo al que posteriormente retornó y en el que se mantiene actualmente.

El caso es que en mayo de ese año el Ing. Ñique convocó a su despacho a los dirigentes de los asentamientos humanos instalados en las 308 y 217 hectáreas, las mismas  que eran de propiedad del proyecto Chinecas y, como bien sabemos,  fueron invadidas con fines premeditadamente políticos.

Pero el motivo de la convocatoria no fue para que el Ing. Ñique hiciera saber  a los invasores el inicio de un proceso de desalojo, como era su deber y como todo el mundo esperaba. No.  Lo hizo para comunicarles con la mayor complacencia que podían seguir ocupando las tierras invadidas  y que él estaba dispuesto a brindar todo su apoyo para que más adelante puedan obtener su respectivo título de propiedad; como que, en efecto, así  está  sucediendo. No sabemos si eso mismo sería capaz de hacer ahora el Ing. Ñique en la gerencia de Chavimochic.

Empero, no hace falta acudir a mayores interpretaciones, ni de forma ni de fondo, para advertir que por hechos de esta naturaleza el Proyecto Especial Chinecas está como está, totalmente estancado desde hace más de treinta años. Con más del 30% de sus tierras en poder de invasores, la gran esperanza de desarrollo de Ancash está convertido ahora en el más grande ejemplo de cómo ahuyentar la inversión y de lo que no se debe hacer con la gestión de los grandes proyectos de interés nacional.

En todos estos años, los funcionarios que han dirigido Chinecas no han sido capaces de elaborar un solo estudio técnico que sustente su factibilidad a pesar de todos los presupuestos destinados para este cometido. Hasta el día de hoy ni siquiera  logran ponerse de acuerdo respecto al tipo de bocatoma por el que se va a optar; mejor dicho, ni siquiera  se sabe por dónde empezar.

Pero el caso de Chinecas no es el único que exhibe la falta o equivocada capacidad de gestión de los funcionarios  que nombra el gobernó regional de Ancash. Los diferentes cargos de confianza han sido ocupados por funcionarios no solo carentes de capacidad y experiencia, sino también faltos de identificación y compromiso con el desarrollo de la región; tanto así que muchos de ellos resultan trabajando a favor del enemigo.

Exactamente lo  mismo que acaba de ofrecer el gobernador electo, ya lo han dicho todos sus predecesores antes de asumir el cargo. De nada ha valido que los colegios profesionales envíen una terna con el currículum de sus miembros más calificados. Al final, y al menos hasta hoy, los gobernadores han nombrado a funcionarios que no han hecho nada por el desarrollo regional de Ancash. Los estudios y la experiencia no son suficientes.