Lo que no se pudo hacer en 28 años, se consiguió en apenas mes y medio. La transferencia del inmueble que se encuentra ubicado en el Centro Cívico de Nuevo Chimbote, es algo que la Municipalidad Provincial del Santa debió realizar a favor de la comuna distrital tan pronto como ésta fue creada por Ley 26319 de fecha 1° de junio del año 1994. En el peor de los casos y teniendo a la mano todos los medios tecnológicos que ahora están al servicio de la administración pública, dicha transferencia no debió tardar más de dos años.
Para nadie es un secreto que fue precisamente ahí, en ese inmueble conocido como Biblioteca Inca Garcilaso de la Vega, donde hace 28 años la municipalidad distrital de Nuevo Chimbote inició sus funciones. Obviamente, su transferencia era un proceso connatural derivado de la propia ley 26319 y directamente relacionado con el acondicionamiento territorial y administrativo del nuevo distrito. No había necesidad de perder tanto tiempo buscándole tres pies al gato.
Si se ha perdido 28 años inútilmente, ha sido por falta de interés y voluntad política, tanto de parte de los alcaldes provinciales como de los alcaldes distritales que han gobernado durante todo este tiempo. La transferencia de este inmueble es algo que, tarde o temprano, tenía que realizarse sí o sí. Después de todo, son bienes de propiedad del estado. No había necesidad de dar tanto brinco si el suelo está parejo.
Ha sido recién esta semana, a mes y medio de haber iniciado su gestión los alcaldes Luis Gamarra Alor y Walter Soto Campos, que se ha firmado la minuta notarial que legaliza la referida transferencia, Con la firma de dicha minuta, la inscripción del inmueble a favor de la municipalidad de Nuevo Chimbote en la oficina de Registros Públicos es cuestión de días.
La culminación de este proceso de inscripción permitirá a la comuna distrital iniciar en forma inmediata los trámites para remodelar y ampliar el inmueble, lo que a su vez hará posible la habilitación de nuevas oficinas para albergar a las numerosas dependencias que ahora tiene la comuna de Nuevo Chimbote. Pues debido a la falta de espacios adecuados, muchas de estas dependencias vienen funcionando actualmente en los polideportivos de Bruces y Casuarina incluyendo el mismo teatro Municipal, con toda la incomodidad que eso ocasiona no solo a los trabajadores municipales sino también a la propia comunidad.
En el marco de la ceremonia realizada con motivo de la legalización de esta transferencia, el alcalde provincial anunció que en breve se hará lo propio con el terreno de 17 hectáreas a un costado del denominado Parque Industrial San Antonio, un proyecto que hace 50 años fue promovido por el organismo CRYRZA (hoy Gobierno Regional de Ancash).
Igual que muchos otros proyectos que cayeron en manos del ente regional, el parque industrial San Antonio también ha quedado en eso y nada más: un proyecto. Hace unos años fue transferido a la municipalidad provincial del Santa pero, igual, permanece totalmente abandonado y bajo la amenaza constante de ser invadido por los traficantes de tierra.
Si, después de tanto tiempo perdido, la comuna distrital logra darle un buen uso a estos bienes, en buena hora. Cualquier transferencia que se realice pensando y actuando positivamente, va a poner término a cualquier intransigencia.