El poder de la buena alimentación:
Junsú y Elif Vellota Narro son dos hermanitas sorprendentes, quienes gracias a la alimentación que reciben del Programa Nacional de Alimentación Escolar Qali Warma, del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), desafiaron las expectativas tras la pandemia del COVID-19.
Ambas son inseparables y comparten no solo un lazo de sangre, sino además el gran amor por el aprendizaje, por eso, acuden a diario a la institución educativa n.o 88270, del centro poblado La Mora en la provincia Del Santa, y con una perseverancia inquebrantable, se esmeran por cumplir con los quehaceres educativos y adquirir más conocimientos.
Junsú, la mayor, tiene 8 años, y destaca especialmente en dibujo, comunicación y matemáticas, y ha demostrado tener una habilidad asombrosa para resolver con facilidad complejos problemas matemáticos.
De tal modo que, al tratarse de un colegio unidocente donde el director tiene a su cargo diferentes grados, ella es la primera en cumplir su tarea y de inmediato empieza a explicarle a sus compañeros, por si tienen alguna duda de cómo resolver los ejercicios.
Por su parte, Elif, la menor, a sus 6 años, retornó a la presencialidad y fue directo a primer grado de primaria, y a pesar de ello lee, escribe y resuelve los dictados con una destreza y fluidez increíbles.
Esta historia, que sin duda es una de las muchas que existen en nuestro país, está cargada de perseverancia y esfuerzo, teniendo como un factor fundamental para el éxito: la buena alimentación en la edad escolar.