Saneamiento de límites Ancash-La Libertad:
Por amplia mayoría, el pleno del Congreso de la República aprobó, el pasado miércoles 21, el proyecto de ley 5228 que propone el saneamiento definitivo de la demarcación limítrofe entre los departamentos de Ancash y La Libertad. De acuerdo con el proyecto de ley, el referido saneamiento comprende cuatro tramos de la línea que divide ambos departamentos, uno de los cuales comienza en la confluencia del Rio Santiago con el río Tablachaca y termina en el punto donde del rio Tablachaca une sus aguas con las del río Santa.
No está demás precisar que, a todo lo largo de este inmenso tramo y , a partir de allí hasta la desembocadura del Santa en el océano Pacífico, todas las tierras que se hallan en la margen izquierda de ambos ríos, pertenecen al departamento de Ancash; en tanto que las tierras de la margen derecha pertenecen a La Libertad. Demás esta mencionar que este ordenamiento connatural, está inspirado en el principio universal de la división de aguas.
Cabe mencionar asimismo que el saneamiento de esta demarcación territorial ha sido propuesto por la Comisión de Descentralización, Regionalización, Gobiernos Locales y Modernización de la Gestión, del Congreso de la República. Como es menester, gestiones de esta trascendencia se sustentan en una serie de elementos de orden jurídico, histórico, geográfico y cultural; entre los que se ha tenido en consideración un acta de demarcación, firmada el 10 de julio del 2018 entre los gobiernos regionales de Ancash y La Libertad.
Se colige por tanto que, una vez aprobada la ley de saneamiento, la demarcación Ancash-La Libertad tendrá que estar a cargo de una comisión bi-departamental y un equipo de profesionales con mucha ascendencia en asuntos de esta envergadura. La delimitación que resulte de este cuidadoso trabajo, pasará a formar parte de la Carta Nacional.
Como se sabe, la delimitación geográfica resulta ser el principal punto de referencia para establecer, a partir de ahí, el orden político y administrativo del país. Sin embargo, muchos de los vacíos que aún existen y prevalecen en este aspecto, suelen dar lugar al aprovechamiento desleal que caracteriza a nuestra política criolla.
Y no es que estemos sucumbiendo al hormigueo de traer malos recuerdos, pero la experiencia nos dice que, ante este anunciado saneamiento, los ancashinos debemos permanecer con los ojos bien abiertos. Pues cada vez que de ventajas políticas se trata, nuestros vecinos de La Libertad siempre se las han arreglado para obtener ventajas a su favor y dejarnos con la miel en los labios.
Primero fue la priorización de Chavimochic en perjuicio de Chinecas, que el primer gobierno de Alan Garcia impuso de un plumazo no bien inició su gestión en 1986. Luego vendría el traslado de la sede de Hidrandina, de Chimbote a Trujillo, perpetrada en1988. Todavía se recuerda las palabras de la alcaldesa trujillana en aquel entonces, doña Miriam Pilco Deza, cuando, por toda justificación, afirmó muy suelta de huesos que, al lado de Trujillo, “Chimbote es un inmenso pueblo joven”.
Posteriormente, funcionarios del gobierno regional La Libertad, pretendieron construir en la margen izquierda del río Santa, es decir en suelo ancashino, dizque unas oficinas administrativas. Tras las publicaciones que hizo el Diario de Chimbote, los funcionarios liberteños se vieron obligados a desistir en su intento. El último de los malos recuerdos, es la construcción de un muro de concreto en medio del río Santa, que ha levantado la gente de Chavimochic, sin autorización de nadie, para captar un mayor volumen de agua.
Es de esperar, por eso, que el saneamiento de los límites entre los departamentos de Ancash y La libertad, se lleve a cabo sin pasarse de la raya.