Personas están cometiendo delitos:
Cuatro conexiones clandestinas de agua potable y una de desagüe que estaban ubicadas en la urbanización Bellamar, en el distrito de Nuevo Chimbote, fue descubierto por personal de la empresa Sedachimbote en el marco de un operativo contra el clandestinaje.
El operativo a cargo del jefe de la Oficina de Comercialización, abogado Diógenes Pichén Reyes y la asesora legal de la Gerencia de Asesoría Jurídica, abogada Leilis Lozano Zavala, permitió constatar el hallazgo de conexiones de agua potable y desagüe, empalmadas a la red matriz, las cuales derivaban hacia las viviendas de la zona.
Lo que causó mayor sorpresa y preocupación fue que una de las conexiones clandestinas estaba conectada a una línea de impulsión de 18 pulgas de diámetro que abastece a todas las líneas matrices del sector y zonas aledañas; una mala manipulación y las consecuencias habrían sido de grandes proporciones, causando aniegos y, sobre todo, el desabastecimiento del líquido elemento en miles de hogares formales en los servicios de saneamiento, informó la empresa del agua potable.
Tras descubrir las conexiones clandestinas se procedió a la clausura de las tuberías ilegales de agua potable de una pulgada de diámetro aproximadamente, siendo más de 150 metros de extensión, las cuales perforaban de forma directa, (sin abrazadera) a la red matriz, causando baja presión de agua para los usuarios formales.
Por otro lado, Sedachimbote clausuró una conexión clandestina de desagüe de 6 pulgadas que servía a más de 100 familias de la zona, que al no tener donde evacuar sus aguas residuales, optaron por conectarse de manera ilegal a las redes de la empresa paramunicipal.
Sedachimbote recordó que estas conexiones clandestinas le generan un perjuicio y a la vez, a los usuarios formales, porque al manipular las tuberías de manera inadecuada podrían contaminar el agua potable, causando un daño en la salud de las familias usuarias, y cuantiosas pérdidas económicas en agua no facturada.