Por: CÉSAR VILLON RUIZ
Cuando el hombre pierde el valor de la palabra AMOR, hacia Dios y su prójimo, viene a ser un hombre que no ama ni se ama. Entonces diremos el hombre siempre ha sido y será el mismo en todas sus acciones como el ser incomprensible en todos sus actos evolutivos buenos y malos. Querido lector si Dios nos ha dado la vida en este maravilloso planeta tierra, es porque “Dios es Amor”; en las Sagradas Escrituras está escrita la palabra Amor 3 mil veces, dándonos entender nuestro Dios Jehová, que la palabra amor debe primar sobre todo con nuestro género humano.
Por eso mi querido lector, para ser feliz, la palabra amor debe florecer en nuestra vida en: Amor de Dios, Amor a una mujer, Amor a la patria, Amor al arte, Amor maternal, Amor filial. Todo a una sola y misma voz ampara y nombra la fama emocional en nuestras vidas. Cuando en uno existe un amor Espiritual ante tu prójimo decimos, que el amor es vivir en aquellos que se aman, es pensar sus pensamientos, adivinar sus deseos y participar sus afectos; cuando el amor es grande, no hace falta las palabras, porque en el silencio más completo el Amor lo dice todo. Nuestro reflejo está en unos mismo, el que es de limpio corazón y de grande amor, sabe que la vida le sonríe y se siente feliz.
Querido lector no olvidemos que nuestro cuerpo en un templo demasiado hermoso para que guardes en él, el odio y la envidia, para terminar en un enemigo, porque él no está en paz consigo mismo, no puede estar en paz con los demás. En nuestras vidas debemos caminar que dentro de nuestro corazón debe latir la palabra Amor, porque tiene 3 grandes cualidades: respeto, cuidado y ternura.
Querido lector tener un gran Amor se encuentra en lo más profundo de nosotros, es nuestra forma de Amar, aceptar y tratar a quienes nos rodean, porque en el Amor se debe poner más en las obras que en las palabras, y con el Amor vences, porque tiene su origen santo.
En las Sagradas Escrituras la palabra Amor es el fundamento dicho por Dios: “Porque de tal manera Amó Dios al mundo, que ha dado a su hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda más tenga vida eterna”, San Juan 3: 16. “El Amor perfecto arroja de si todo miedo; Dios es Amor y el que mora en el Amor mora en Dios y Dios en él”, 1 Juan 4: 16. “El Amor es sufrido, es benigno; el Amor no tiene envidia, el Amor no es jactancioso, no se envanece, no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta, El Amor nunca deja de ser: pero las profecías se acabarán y cesarán las lenguas y la ciencia acabara”. 1 Corintios 13. Querido lector leer la biblia es cosa de sabios, entenderla adquiere el perdón, y practicarlo es cosa de santos. Amén