Editorial

Un procurador defiende los intereses del estado

Ahora resulta que no solamente la Superintendencia de Bienes Nacionales  tendrá  que poner las manos al fuego para solucionar el candente problema que ha originado  el propietario del restaurant Rico Chimbote con la ocupación ilegal de un espacio de uso público destinado a áreas verdes, el mismo que se encuentra ubicado en la urbanización Santa Cristina, en estratégica intersección de las avenidas Brasil e Anchoveta de Nuevo Chimbote.

Sin necesidad de darle más vueltas al asunto, éste es un problema  que innecesariamente se viene dilatando  por más de treinta años, pero que en todo este tiempo ha puesto en clara evidencia que los encargados de la municipalidad distrital de Chimbote no tienen el menor interés en resolverlo. ¡Qué más quiere el infractor!

Como hemos dado cuenta en nuestra edición del jueves 25, ha sido a petición de la propia Procuraduría de la comuna distrital, y prácticamente en el más extraño silencio,  que el caso también  ha sido judicializado desde hace ya varios meses. Ahora tendrá que ser el 5to. Juzgado Civil de la Corte Superior de Justicia del Santa, el organismo que finalmente resuelva lo que los funcionarios de la comuna distrital no son capaces  o simplemente no desean  resolver.

En efecto, ha sido ante esta notoria falta de interés y ante el claro deseo  de dilatar las cosas, que dicha instancia judicial ha programado una primera audiencia para el  próximo 25 de abril. Prácticamente después de tres meses, recién vamos  saber con mayores elementos de juicio si  las leyes de la república están a favor o en contra de  esta ocupación ilegal.

Por lo pronto, ya es decepcionante  haber comprobado que, para la comuna distrital de Nuevo Chimbote,   de nada vale la vigencia de Ley 30230.  Sin más trámite que la obtención de  un mandato extrajudicial, esta norma legal ordena el desalojo inmediato de los predios de propiedad del estado que se encuentren en posesión ilegal, como es el caso del área verde que ocupa el restaurant Rico Chimbote.

Hasta donde se ha podido verificar, el único documento que el propietario de este local comercial  exhibe en su defensa, es una licencia municipal del año 2010 donde aparece la dirección de su vivienda particular, más no la dirección del área verde, que es  donde funciona el restaurante.

Precisamente la resolución del 5to. Juzgado Civil que dispone la apertura del  proceso, ha hecho  una advertencia bastante precisa. Si, tanto la municipalidad distrital de Nuevo Chimbote como el propietario del restaurant Rico Chimbote, incurriesen en falsedades que solo generen pérdida  de tiempo, o que presenten escritos que no estén debidamente fundamentados  y que asimismo desobedezcan las órdenes del juez, éstos serán sancionados conforme a ley. Es de esperar que esta advertencia no quede solo en el papel.

Pero aún queda otro punto por aclarar. La disposición del 5to. Juzgado no habría  considerado, ni al menos como tercero civil,  a la Asociación de Moradores de la Urbanización Santa Cristina que es la institución que desde un primer momento denunció esta ocupación ilegal y es la única que se mantiene al frente de la reclamación. Es importante precisar que existen en la municipalidad informes técnicos de diferentes áreas e incluso hasta de asesoría legal y las gerencias de obras privadas y desarrollo urbano que no han sido tomados en cuenta por la procuradora municipal. Lo que no se entiende es la labor de la procuradora.