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CAMBIAR YA

Van a seguir pasando los días y se seguirá hablando del incendio de los totorales de Villa María, el más grande de todos los que han ocurrido hasta el momento, los humos llegaron a lugares insospechados. Después del domingo donde hubo mucho viento, los humos que producía el incendio llegaron hasta los centros poblados del valle Santa – Lacramarca, pero el día lunes, al bajar la intensidad de los vientos, estos aparecieron en el sector urbano, desde el Trapecio hasta muchísimo más allá de la Florida. El humo llevaba las cenizas. Esto debe hacer reflexionar a las autoridades, para iniciar el trabajo de cambiar el estatus legal de la zona (humedales de Villa María). No se debe perder el tiempo, porque una situación es la parte legal y otra es la parte operativa que está a cargo de investigar las razones del incendio. Sobre este tema, en estas páginas hemos informado y opinado respecto a las labores de la Policía Nacional y el Ministerio Público, porque estas entidades conocen muchos detalles de la explotación de la totora y, por eso, llama la atención que hasta el momento no actúen.

COMPLEJOS DEPORTIVOS

Las quejas y denuncias sobre el uso que están teniendo hoy en día los complejos deportivos de la Municipalidad Provincial del Santa es un tema que debemos tenerlo en cuenta. Aquí hemos informado y opinado editorialmente sobre la forma tan sibilina cómo se utilizan estos complejos deportivos; muchos de ellos se han convertido en centros de bailes,  donde se organizan eventos, la mayoría de ellos estridentes que, definitivamente perturban la tranquilidad de los vecinos. Hay complejos deportivos como El Acero, donde los organizadores de estos eventos son los que venden licor, comida y manejan los permisos como les viene en gana. La dependencia municipal (Gerencia de Desarrollo Social), es cómplice de todo lo que ahí ocurre, porque está llena de funcionarios inútiles que solo calientan sus asientos (se la llevan fácil). En algún momento la municipalidad provincial tendrá que modificar los reglamentos para el uso de estos complejos deportivos y, dejar de lado a todos esos sujetos que trafican con la buena fe, vendiendo licor y comida en supuestos eventos deportivos. Esto tiene que acabar.

DELINCUENTES EN LAS CALLES

Hace unos días y, producto de una celada, cayó un extorsionador, en el momento que recibía un dinero por parte de un comerciante. El Ministerio Público ha logrado que le otorguen prisión preventiva. El asunto es que este sujeto tiene una condena de doce años por robo agravado, pero estaba libre porque la Sala Penal no confirma aún dicha resolución. Es un delincuente con antecedentes, comete el delito, lo juzgan, lo condenan y sigue libre, gozando de plena libertad continúa cometiendo delitos. Ahora cayó en flagrancia y solo espera que en algún momento esa Sala Penal confirme la sentencia para que permanezca doce años en el penal, luego con seguridad en otro juicio, recibirá otra pena por la extorsión. Todo depende del Poder Judicial. Ejemplos sobran.

JUECES DE PAZ

En los últimos días se ha anunciado en el Congreso de la República que la comisión de Descentralización ha aprobado por unanimidad un proyecto de ley que otorga competencias a los jueces de paz. Señala ese proyecto de ley que, en las solicitudes de autorización judicial para demoler inmuebles que contravengan las normas y cuando esté en riesgo la vida y salud de la población en general, pueden dictar resoluciones para la demolición de esos inmuebles. El texto sustitutorio compone que ya no será necesario que la autoridad municipal solicite la autorización judicial de demolición ante los jueces especializados en los civil, sino por la vía sumarísima al juez de Paz Letrado de la Circunscripción, donde se encuentre el inmueble o edificación objeto de la medida correctiva. Se tiene que entender bien la norma, es decir, el Juez de Paz solo podrá intervenir si el inmueble pone en riesgo la vida y salud de los pobladores. No es para cualquier inmueble. Si estas modificaciones de las normas ya están aprobadas en las modificaciones, con seguridad las van a aprobar en el Pleno, salvo que exista algún sustento que las desmerezca, pero reiteramos, según el proyecto de Ley, será solo para inmuebles que pongan en riesgo la vida y salud de los pobladores y nada más.