POR: FERNANDO VALDIVIA CORREA
El pasado 7 de junio, el Juez Supremo Juan Carlos Checley acogió en parte el requerimiento fiscal, ampliando por 14 meses adicionales la prisión preventiva en contra de Pedro Castillo, con lo cual quedará privado de su libertad hasta el 6 de agosto de 2025. Más aún, el último jueves arribó a nuestra capital Alejandro Sánchez, deportado de los Estados Unidos de Norteamérica. Sobre sus hombros pesa una orden de prisión preventiva por 30 meses en la investigación conocida como “asesores en la sombra”, que involucra directamente a Castillo Terrones. Es evidente que con la llegada de Sánchez Sánchez, la situación jurídica del exmandatario se complique más, pues es sabido que la casa de Sarratea sirvió de informal punto de reunión del prosor con siniestros personajes para efectuar presuntamente actividades ilícitas.
Contrario sensu es la realidad que enfrenta Martín Vizcarra. Literalmente “nació parado”, toda vez que en marzo de este año el Poder Judicial ordenó prisión preventiva por 36 meses en contra de Carlos Revilla y Alcides Villafuerte, exfuncionarios de entera confianza de Vizcarra Cornejo en Provías, al formar parte de la organización criminal “Los intocables de la corrupción”, liderada precisamente por el mitómano expresidente. A este último, solo allanaron su domicilio. En esa misma línea, recientemente el controvertido interino Fiscal de la Nación archivó la denuncia por presunto delito de colusión en su contra por el caso de las compras masivas de pruebas rápidas en plena pandemia del Covid19. Asimismo, en mayo de 2020 los medios de comunicación dieron a conocer que Richard Cisneros facturó S/ 175 mil al Ministerio de Cultura por servicios que nunca brindó. El hoy polémico “Richard Swing” habría cobrado ese monto dinerario avalado por el mitómano exjefe de Estado. El diario Expreso da cuenta que recién en esta semana se ha programado Audiencia en la que la Procuraduría viene requiriendo el pago de S/ 500 mil al ex gobernante y cómplices. Y, además con harto bombo y bastante platillo, el abyecto Vizcarra participó de la celebración del primer aniversario de su partido “Perú Primero”.
Cierto es que el ilustre hijo chotano cometió excesos, y quizá hasta delitos, mientras anduvo en el poder, y por ello debe asumir las responsabilidades; sin embargo, Martín Vizcarra también lo hizo, y de una manera bastante grosera, riéndose de la precaria justicia, que en buena cuenta significa que sigue burlándose de todos los peruanos. ¿cuándo alcanzará el brazo de la ley a Vizcarra Cornejo?.