Por: WALTER MIGUEL QUITO REVELLO
El lunes 5 de agosto se publicó la Ley N° 32105, que modifica sustancialmente la Ley Universitaria, Ley N° 30220. Estas modificatorias no alcanzan para que La Universidad San Pedro (USP) y la Universidad Católica Los Ángeles de Chimbote (ULADECH) puedan obtener su licenciamiento. Al parecer le diremos adiós a nuestras universidades.
Con la modificatoria de la ley universitaria, el licenciamiento ya no es renovable cada cierto número de años, sino que ahora es permanente; además se permite que modalidad de estudios a distancia sea 100 % virtual, salvo algunas excepciones; y, se establecen modalidades para que SUNEDU supervise la calidad de la educación, pero no se quitara el licenciamiento. Antes se les evaluaba cada seis años y podían perder el licenciamiento si no cumplían con las Condiciones Básicas de Calidad (CBC). La modificatoria a la Ley universitaria es para que el licenciamiento sea a perpetuidad por lo que la Ley, beneficia a las universidades ya licenciadas que no es el caso de ULADECH y USP que no lograron su licenciamiento.
Antes de la modificatoria de la ley, para el licenciamiento las universidades tenían que cumplir con las Condiciones Básicas de Calidad (CBC) establecidas en la Ley Universitaria. Para ello la SUNEDU evaluaba en base a 44 indicadores de las cuales 33 incumplió la USP, y 20 incumplió la ULADECH. Por ello la USP y la ULADECH, ambas de Chimbote, se encuentran en proceso de cese de actividades, luego que no consiguieran su licenciamiento institucional, pero esto no es impedimento para que puedan una vez más solicitar la licencia institucional como universidades nuevas siempre y cuando cumplan con las CBC. Por ejemplo, a la ULADECH se le denegó su licenciamiento porque no evidenció contar con sistemas que aseguren el acceso y disponibilidad continua del servicio de agua potable en sus locales conducentes a grado académico; y, No contó con un Portal de Transparencia con información actualizada ni consistente, entre otros; a la universidad USP se le denegó el licenciamiento por no tener tópico y servicios deportivos y culturales entre otros. Observaciones que pudieron ser levantadas.
Para la ULADECH y USP no le queda otra cosa que cumplir con el CBC, para que puedan lograr su licenciamiento como nuevas universidades. La ULADECH intento funcionarse con la Universidad Católica de Trujillo (UCT) para ganar tiempo, pero al final fracaso; en cambio la USP hasta junio del presente año no tenían vigencia de poder actualizada, al no poder inscribir a sus nuevas autoridades en los registros públicos. Ese desorden administrativo ha llevado a que perdamos dos de nuestras casas de estudios.
Tenemos que diferenciar el licenciamiento autoriza el funcionamiento de las instituciones educativas ya que cumplen con las Condiciones Básicas de Calidad (CBC), para brindar el servicio educativo. En ese proceso las universidades que tiene licenciamiento avanzan hacia la acreditación de sus carreras profesionales, que no es otra cosa que el cumplimiento de estándares de calidad a las instituciones educativas y sus programas de estudio que es obligatorio a todas las carreras profesionales. El gobierno central destino S/ 1,000 millones de soles a las universidades públicas para mejorar sus condiciones básicas de calidad. ¿Será necesario presupuestos elevados para lograr el CBC o es una justificación para incrementar el presupuesto a las universidades públicas? En fin. Lo cierto es que a la ULADECH y USP le diremos: “Adiós a mi universidad”
Las reformas universitarias han servido para lograr el control del mercado universitario. Nunca les importo la calidad. No es un secreto para nadie que las universidades ganan millones de soles, como diría un congresista, casi presidente del país y dueño de universidad: “Plata como cancha” Pero en las universidades hay profesores mal pagados mínimo rigor académico, ninguna investigación científica. Se venden pregrados, maestrías y cualquier otro diploma, con tal de maximizar los ingresos. Gracias a las alianzas de fuerzas políticas que tienen entre sus filas a los dueños del negocio universitario, a los lobistas que pululan alrededor del negocio universitario, y a los congresistas que venden su voto o intercambian votaciones pero que les importe la educación universitaria, como diría mi abuela: “Naca la piriñaca” Que la educación universitaria sea vista como un lucrativo negocio.
En un mundo en competencia con trabajos de mala calidad, estudiar a distancia en una universidad privada y trabajar es un reto, pero necesario, si quieres contribuir con el desarrollo de tu sociedad y de tu familia. Esa competencia y el deseo de querer contribuir con tu sociedad, te obliga a estar en constante estudios, actualizaciones.
Miremos a la Corte Superior del Santa como ejemplo, muchos de sus auxiliares, asistentes e incluso jueces salieron de la ULADECH y USP ya sea como estudiantes de pregrado o posgrado. Para el pueblo no queda otro camino que trabajar y estudiar.