SE EQUIVOCARON
Algún erudito con cerebro retorcido dentro del MEF, definitivamente creyó tener la razón para recaudar dinero para las arcas del Estado, lamentablemente se equivocaron en la modalidad elegida; aunque meses atrás ya se había escuchado sobre el dinero que transita en el ciberespacio o, en otras palabras, que se cobran por los servicios que se prestan en internet. Han dispuesto que se cobre impuesto a todo aquel que use servicios por internet y, en la actualidad esos servicios lo prestan personas jurídicas no domiciliadas en el país, en otras palabras, no tiene RUC; cobran a los usuarios a través de las tarjetas de crédito o débito en el sistema financiero formal. Según la norma que gravará este servicio señala que serán los bancos (entidades financieras) las que van a realizar esa retención del impuesto, puesto que las empresas que venden ese servicio no están en el país. Como los bancos no hacen nada gratis, van a cobrar ese servicio y ese famoso IGV que el gobierno pretende cobrar, ya no será 18% para el usuario, sino que se agregará la comisión de servicios de la Entidad financiera. Nos preguntamos: ¿y quién entregará la factura al usuario?, porque la entidad financiera podrá girar su comprobante por la comisión que cobrará, pero no por ese famoso 18% que debe ir a las arcas de SUNAT. ¡Qué manera de dispararse a los pies! No hay otra interpretación. Arista parecía un tipo bien ubicado, pero todo indica que no lo es.
NO MÁS IMPUESTOS
Como los impuestos se cobran para recaudar y como ahora un déficit, en el MEF no se le ha ocurrido mejor idea que gravar esos servicios que mayoritariamente lo pagan los usuarios de todo tipo de sectores. Ese déficit que se crea en el Estado es por el asistencialismo del gobierno. Ese asistencialismo no se ha dejado continúa mucho más fuerte y así no vamos a salir nunca de la incertidumbre. Por ahora, todos son gastos y el MEF da carta libre cuando debería hacer lo contrario y han dejado de lado la tarea de encender el motor que da vida a la economía como es la inversión privada. Sin inversión privada, no iremos a ningún lado. Se debe desmontar ese aparato burocrático que se edificó hace año y medio y un poco más y que impide que el inversionista actúe. Los días y meses pasan y la realidad indica que aún no estamos en el camino correcto. La inversión pública no es suficiente porque tiene enormes deficiencias que aún no son superadas por la falta de gestión pública eficiente y por la corrupción. ¿Hasta cuándo? No lo sabemos.
MARTIRES POLACOS
Han pasado treinta y tres años desde aquel agosto de 1991 cuando sucedieron esos hechos trágicos a dos religiosos polacos, en Pariacoto. Los oficios religiosos en este aniversario han estado a cargo del propio obispo Ernesto Zapata Bances. El recuerdo hacia los sacerdotes polacos sigue vigente por la labor evangelizadora que realizaron con mucho apego a la comunidad. Allá no los olvidan, estarán siempre en la memoria de todos.