Región Policial Ancash:
Tan igual como sucedió hace varios años con la empresa pública Hidrandina y conforme ha seguido sucediendo con otras reparticiones estatales, la Región Policial de Ancash, cuya sede es la ciudad de Huaraz, está impedida de realizar directamente la compra de equipos, combustible y hasta material de escritorio. Por muy urgente que pudiera ser la necesidad de realizar estas adquisiciones o de contratar servicios complementarios, todos estos requerimientos deben ser solicitados, aprobados y adquiridos por la Región Policial La Libertad con sede en la ciudad de Trujillo. De acuerdo con la estructura funcional y operativa de la Policía Nacional del Perú, empezando por el manejo presupuestal, Ancash depende verticalmente de La Libertad.
Como es fácil deducir, esta falta de autonomía de gestión mantiene a la Región Policial Ancash poco menos que con los pies y las manos atadas. Todos sus requerimientos tienen que ser aprobados en Trujillo cada vez con más firmas e informes de por medio, con toda la pérdida de tiempo y de capacidad operativa que eso representa para la labor policial. Por lo demás, aquí también cabe lo que dice aquel viejo refrán: el que reparte, se queda con la mejor parte.
Sin necesidad de acudir a interpretaciones antojadizas ni a poses melodramáticas, todo apunta a establecer que esta falta de autonomía tiene mucho qué ver con la dramática carencia de equipamiento y logística de la que adolecen las comisarías y puestos policiales de la provincia del Santa. Así de concreto. Se afirma, por ejemplo, que desde hace ya buen tiempo la comisaría de Villa María dispone de solo un vehículo operativo para cumplir su labor. ¿Es así cómo se piensa combatir la ola de delincuencia que azota a ese populoso sector?
En una reunión realizada hace dos días, el ministro del Interior Juan José Santibáñez se comprometió ante el alcalde provincial y cuatro alcaldes distritales de la provincia del Santa, a gestionar ante las instancias correspondientes la autonomía presupuestal de la Región Policial Ancash para que ésta ya no siga dependiendo de la Región Policial La Libertad. Ante la creciente ola de criminalidad que se registra en los distritos de Chimbote y Nuevo Chimbote, la labor policial necesita de una reacción inmediata y de una implementación mínimamente adecuada para poder combatirla con éxito.
Pero este ofrecimiento ministerial no es de ahora. Ya lo hemos escuchado en anteriores oportunidades, sin embargo hasta hoy la Región Policial Ancash continúa bajo el teje y maneje de la Región Policial La Libertad. Para que este tipo de ofrecimientos no quede en promesas, que solo sirven para dorar la píldora y salir del apuro, hace falta que este compromiso pase del dicho al hecho. Es de esperar por tanto que el ofrecimiento del ministro Santibáñez se convierta en una resolución ministerial, que despeje toda duda y que oficialice de una vez por todas la autonomía administrativa y funcional de la Región Policial Ancash. Por principio elemental, en la gestión pública hablan los documentos.
Funcional y administrativamente hablando, para que la Región Policial Ancash goce de esa ansiada autonomía y pueda mejorar su labor, requiere estar libre de la región La Libertad.