Otra polémica obra regional:
Después de una larguísima espera de doce años debido a sucesivos y garrafales errores en la elaboración del expediente técnico, por fin el 8 de julio del 2024 el gobierno regional de Ancash a través de la Sub Región Pacífico adjudicó la obra de electrificación rural a favor de los pueblos Lacramarca Baja, La Mora, Las Lomas, Carrizales y Túpac Amaru, una activa zona agrícola donde más de 1,100 familias celebraron a lo granes el acontecimiento. Y no era para menos. El sueño tanto tiempo esperado empezaba a hacerse realidad.
Con un presupuesto de 10.5 millones de soles, la ejecución de este anhelado proyecto fue adjudicada a la empresa contratista Consorcio Lacramarca, integrada a su vez por las empresas M&C Ingenieros SRL y JF&JIM Ingenieros SAC. El plazo de ejecución de la obra fue pactado en 180 días calendario, contabilizados a partir de la firma del contrato. Sin embargo, conforme lo ha informado el Portal de Transparencia Económica del MEF y cuando falta menos de un mes para que cumpla el pacto de caballeros, la obra tanto tiempo esperada registra un avance de apenas el 48 por ciento, ni siquiera la mitad; lo que hace imposible esperar que en el corto tiempo que falta se pueda obtener ni siquiera un resultado medianamente favorable. Otra obra regional polémica y desencantadora.
Como hemos informado en nuestra edición de ayer, el avance de la obra es desconcertante y patético. Solo en el pueblo Las Lomas, el más poblado de la zona, ni siquiera se han realizado los trabajos de medición de campo y por toda explicación el representante legal del consorcio se ha limitado que esto se debe “a la falta de plata”. Esta desconcertante explicación trae por los suelos uno de los acuerdos básicos del contrato según el cual, y conforme lo exige la OSCE, la empresa contratista está en la obligación de acreditar una solvencia económica. En el caso del contratista el límite máximo es 60 millones de soles .
Por otro lado, se sabe que una de las empresas que integran el Consorcio Lacramarca , está ejecutando en simultáneo otra obra por 10 millones de soles en la lejana ciudad de Sullana. De ahí que otra pregunta que se hacen los pobladores afectados es ¿qué se ha hecho con el adelanto del contrato y los pagos por avance de obra?. ¿No es que tienen que ir aparejados?.
A menos de un mes para que se venza el plazo de ejecución, es de temer que este proyecto de electrificación rural aumente la larga lista de obras paralizadas y con problemas que arrastra sobre sus hombros el gobierno regional de Ancash. Ayer, al menos hasta el momento en que escribíamos estas líneas, la Sub Región Pacífico fiel a su estilo no había dado ninguna explicación al respecto.
Cuando los moradores de estos cinco pueblos rurales se aprestaban a iniciar el año 2025 con el servicio de electricidad en sus hogares, ahora resulta que no se sabe hasta cuándo van a tener que seguir alumbrándose con velas y lamparines y con la guardia baja.