Es una verdad que no se puede ocultar. Tenemos hospitales colapsados como son La Caleta y Laderas del Norte de Essalud, porque sus infraestructuras datan de más de 70 años, porque no se han renovado y ahora con muchos más pacientes por atender, ni las ampliaciones alcanzan. Los pacientes, en ambos casos, están instalados en camas ubicadas en los pasillos.
En el caso del hospital III de Essalud, las diferentes denuncias del cuerpo médico sobre las atenciones que se encuentran atascadas y, fundamentalmente por los enormes problemas que tienen las instalaciones de emergencia que ahora resultan pequeñas y, además tienen poca atención, mostrando un cuadro de colapso que no es propio para nuestra ciudad.
Por su parte, la Contraloría General de la República, nos ha dado a conocer que las áreas de emergencia del hospital La Caleta no cumplen con el requisito de tener tamaños mínimos y sin equipamiento técnico necesario y con esa característica de tener pacientes con sus camas, en los pasillos.
Es decir, tenemos en la actualidad y en pleno funcionamiento a dos hospitales de los más importantes de la ciudad, totalmente colapsados, con infraestructura en total deterioro y con hacinamientos por todas sus instalaciones.
Felizmente ambos hospitales tienen proyectos que se encuentran en pleno camino para sus futuras nuevas instalaciones. Como sabemos, el hospital La Caleta es del Estado y en la actualidad hay un convenio firmado entre el GORE Ancash con la Autoridad Nacional de infraestructura (ANIN) y es a través de este vínculo que el proyecto avanza, pues la nueva infraestructura se construirá en los terrenos que el GORE compró en la zona rural del 02 de mayo.
Mientras que, Essalud dispuso para nuestra ciudad el proyecto, en convenio con Pro Inversión para la construcción del hospital Especializado y un policlínico de complejidad creciente, con la finalidad de dotar mejor infraestructura para los asegurados. Ya se conoce al concesionario que construirá el hospital del Policlínico y, cuyo proceso ha empezado con los estudios para la elaboración del expediente técnico. Los terrenos para el hospital y el policlínico están listos, a la espera del inicio de las obras.
En ambos casos, el periodo mínimo para la construcción de las infraestructuras y que sean completamente terminados, es de tres años, si no se presentan problemas, por lo tanto, en el lapso que dure las construcciones de ambos hospitales, se tendrá que seguir soportando aún las viejas estructuras, hoy colapsadas.
Ahora también es importante precisar que, en el caso del hospital La Caleta existe un presupuesto que ha dispuesto el gobierno regional para mejorar las áreas críticas de dicho nosocomio e incluso, se ha previsto hasta comprar equipos. Este presupuesto para la Caleta, Regional e incluso Ramos Guardia (Huaraz). Esperamos que se ejecute pronto porque la realidad así lo pide.
Ese es el panorama de dos de los nosocomios principales de la ciudad, que se encuentran en pésimas condiciones y, lógicamente necesitan ser rehabilitados mientras se construyen las nuevas infraestructuras que tanto se necesitan.