Hemos seguido desde aquellos días de agosto del 2024, todo lo referente a la emergencia ambiental que estalló por aquel entonces, por los trabajos en las minas informales en la zona de Pampas. En aquella oportunidad dimos a conocer con detalle y ubicación lo que sucedía en El Sauco y Pasto Bueno, informando lo que pasaba, incluso dando a conocer documentos ocultos que confirmaban que las entidades oficiales sabían y conocían que la contaminación en esa zona data de una década atrás.
Dimos a conocer que la minería informal prevalecía en Pampas, que grupos de mineros informales eran los que explotaban los socavones de las minas abandonadas y que los movimientos comerciales eran intensos y eso originó que en dicho distrito prevalezcan los que manejan las minas informales y un actor fundamental como es la comunidad campesina, que otorgaba luz verde.
Es más, hicimos público hechos como enfrentamientos entre esos grupos y las autoridades, porque ese manejo de esa minería informal es al margen de la normativa legal vigente. Lo triste y lamentable fue informar como la Dirección Regional de Minería afrontó este problema, casi ignorándolo y lo que es evidente se dio ante estos grupos informales.
Pero eso no fue todo, informamos desde estas páginas lo que ocurría en Pushaquilca, la mina abandonada en la zona de Pelagatos y que estaba en proceso de remediación, es decir, cierre de más de una treintena de bocaminas, como pasivos ambientales. Esa remediación terminó, pero en Pushaquilca siguen explotando los socavones y ahí ha ocurrido una tragedia, pues han fallecido tres personas.
El Estado peruano ha gastado más de 40 millones de soles en esa remediación en Pushaquilca, pero es una especie de maquillaje porque externamente es como si fueran jardines, pero en la parte alta están los socavones que siguen siendo explotados por los mineros informales y es ahí donde se ha producido esta tragedia en la madrugada del domingo.
Las autoridades conocen lo que sucede en ese alejado distrito de Pallasca, es decir, la actividad minera informal, pero lamentablemente no volvieron, después de aquella visita del 08 de agosto del 2024. Todo quedó en nada y las actividades en la zona, es decir, en El Sauco y Pasto Bueno y en Pushaquilca prosiguen tan normales como si nada hubiera pasado.
Respecto a los hechos ocurridos el fin de semana, oficialmente solo hay un muerto, pero había tres fallecidos y las oportunidades que llegaron ahí, es decir, Policía y Ministerio Público sabían, pero solo encontraron un cadáver. Los otros dos cadáveres no estaban. Es así como se manejan estas situaciones en Pampas, allá no existe autoridad y ellos lo saben.
Lo más grave, a parte de los hechos fatídicos, es que la minería sigue y, por lo tanto, la contaminación nunca se detuvo y baja por la cuenca de Tablachaca, no solo con destino al río Santa; sino a los canales de distribución, no solo agrícolas, sino al agua para la población.
Aquí hubo una comisión sobre contaminación, pero no avanzó en su trabajo y no tomaron ninguna decisión y, hoy en día ni siquiera se han vuelto a reunir.
Estamos seguros que desde la Dirección Regional de Minería no van a tomar decisiones, porque para ellos todo seguirá igual, e incluso, como hacia Ricardo Castillejo, en aquel momento, con dos semanas de anticipación, anunciaba la fecha de su presencia y, lógicamente ese día no encontraba a nadie. Con autoridades de esa naturaleza, la minería informal prevalece como hasta ahora, en esa zona liberada y la contaminación continua, porque ninguna autoridad hace algo por impedirlo.