Opinión

EL PERÚ MERECE MÁS QUE PROMESAS: ¿Podrá este gobierno cumplir?

Por: Fernando Zambrano Ortiz.

Analista Político

El discurso de Eduardo Arana sonó bien. Muy bien, de hecho. Habló de crecimiento económico, de seguridad, de obras grandes que cambiarán el país. Pero mientras lo escuchaba, no pude evitar preguntarme: ¿cuántas veces hemos oído esto antes?

Es fácil enumerar proyectos mineros por 64 mil millones de dólares, prometer carreteras que unirán el país o anunciar que por fin acabaremos con la delincuencia. Lo difícil es hacerlo realidad. Y ahí es donde este gobierno, como tantos otros, tendrá que demostrar si está a la altura.

Lo que me da esperanza 

Hay que reconocerlo: algunas cosas suenan bien pensadas. Lo del “shock desregulatorio”, por ejemplo. Cualquier empresario o emprendedor que haya tenido que lidiar con trámites interminables sabe lo que significaría simplificar esa burocracia asfixiante. Si realmente lo hacen, podría ser un cambio importante.

Lo de los ferrocarriles también me llamó la atención. Imaginar un tren conectando Lima con toda la costa norte, o uno que una Lima con Ica, o llevando productos desde la sierra hasta los puertos, es uno de esos sueños que llevamos décadas postergando. Pero ojo, porque ya hemos visto antes cómo proyectos así se quedan en el papel o terminan costando el triple de lo presupuestado.

Lo que me preocupa 

Hablar de seguridad es fácil. Lo difícil es lograrla. Cuando escuché que ofrecerán un millón de soles por información sobre delincuentes, recordé todas esas veces que hemos visto cómo las mafias siguen operando a pesar de las recompensas. No digo que no sirva, pero sin un sistema judicial que funcione, sin fiscales y jueces que puedan procesar a estos criminales, seguiremos en las mismas.

Y qué decir de la minería ilegal. Todos sabemos que es un cáncer que corroe el país, pero también sabemos que hay demasiados intereses creados. Cuando Arana habló de trazabilidad del oro, me pregunté: ¿realmente tendrán el coraje de enfrentar a las mafias que se benefician de esto?

El verdadero desafío 

Al final, todo se reduce a una cosa: capacidad de hacer las cosas. Este país está cansado de discursos bonitos y planes ambiciosos que nunca se concretan. Lo que necesitamos es ejecución.

¿Podrán evitar que estos proyectos se pierdan en la corrupción? ¿Lograrán que las obras no se eternicen? ¿Conseguirán que los ministerios trabajen en serio en vez de dedicarse a la burocracia?

No soy pesimista, pero sí soy realista. He visto demasiados gobiernos llegar con promesas grandilocuentes y terminar enredados en los mismos problemas de siempre. Este tiene la oportunidad de ser diferente, pero para eso tendrá que demostrar que sus acciones valen más que sus palabras.

Lo que realmente importa

Mientras los analistas discutimos cifras y proyectos, hay millones de peruanos que solo quieren vivir mejor. Padres que necesitan seguridad para sus hijos, pequeños empresarios que buscan oportunidades, jóvenes que quieren trabajo digno. Para ellos, lo importante no son los discursos en el Congreso, sino los resultados concretos.

Ojalá este gobierno lo entienda. Ojalá esta vez sea diferente. Pero hasta que no veamos cambios reales, tendremos derecho a seguir dudando. Porque el Perú no necesita más promesas. Necesita hechos.

Alguien que, como tú, quiere creer, pero necesita ver para creer