Sindicación sin sustento:
La denuncia interpuesta por la suboficial de la Policía Nacional, Lerisse Katherine Chumpitaz Ayala, contra el mayor PNP Giancarlo Bassallo Lezama, fue declarada infundada y archivada por el Ministerio Público.
Así lo determinó el fiscal Billy Valderrama Miranda, del Segundo Despacho de Decisión Temprana de la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Nuevo Chimbote, quien concluyó que no procede formalizar ni continuar con la investigación preparatoria contra el oficial policial por los presuntos delitos de acoso y agresiones en agravio de la suboficial Chumpitaz.
La denuncia se remonta al 6 de noviembre de 2024, cuando Chumpitaz, quien laboraba en la Dirección Contra la Corrupción (DIRCOCOR) de Chimbote, acusó a su entonces jefe de intentar ingresar violentamente a su oficina en estado de ebriedad el 6 de junio del mismo año, hecho que —según ella— dio inicio a un presunto hostigamiento laboral.
No obstante, tras un riguroso análisis de las pruebas y testimonios recabados, la Fiscalía concluyó que la versión de la denunciante era falsa y maliciosamente construida.
Entre los principales argumentos del archivo destacan: que el mayor PNP Giancarlo Bassallo no se encontraba en estado de ebriedad durante el incidente; que no hubo forcejeo en la puerta, según los propios videos entregados por la suboficial; y que las conversaciones de WhatsApp presentadas no evidenciaban ningún tipo de acoso, sino un trato laboral cordial y recíproco.
Asimismo, la investigación reveló que el trasfondo del conflicto tendría relación con la presunta filtración de información de inteligencia policial por parte de la suboficial Chumpitaz a su ex jefe y amigo, el suboficial técnico Kelvin Ruiz Seijas, quien habría estado implicado en actos de corrupción.
Dicha conducta fue advertida por el mayor Bassallo, quien había dispuesto la salida de Ruiz de la DIRCOCOR meses antes del incidente denunciado.
La Fiscalía también señaló que las acusaciones por hostigamiento laboral no tenían sustento, ya que los testimonios recogidos evidenciaban un trato igualitario del mayor Bassallo hacia todo su personal, y que las medidas tomadas contra Chumpitaz obedecían a reiteradas faltas disciplinarias cometidas por ella.
Además de esta denuncia archivada, Chumpitaz había presentado otras acusaciones por maltrato psicológico y coacción, las cuales también fueron desestimadas por el Ministerio Público, al no encontrarse elementos probatorios suficientes.