- Juan Jacinto Reyna Cayllahua (33) fue encontrado muerto en el interior de la habitación que alquilaba. Según el informe policial, la víctima fue torturada y asesinada con extrema violencia.
- Reyna Cayllahua registraba antecedentes por robo de maquinaria pesada y había sido detenido en agosto pasado durante un operativo policial en Nuevo Chimbote.
El distrito de Ocros, en la provincia de Huamanga (Ayacucho), amaneció conmocionado tras el hallazgo del cuerpo sin vida de Juan Jacinto Reyna Cayllahua (33), quien fue encontrado en el interior de la habitación que alquilaba.
Según el informe policial, la víctima fue torturada y asesinada con extrema violencia, pues presentaba los pies atados con abrazaderas plásticas, la cabeza cubierta con cinta de embalaje y el cuello oprimido con un pasador.
De acuerdo con la dueña del inmueble, el hombre había llegado días antes al hospedaje asegurando que solo permanecería dos noches. Sin embargo, tras cambiar el candado de su habitación y no responder a los llamados, se reportó su desaparición.
Fue recién cuando la propietaria percibió un intenso olor fétido proveniente del cuarto que decidió alertar a la Policía, la cual ingresó al ambiente y halló la escena del crimen.
El caso es investigado por la División de Investigación Criminal (Divincri) Huamanga, que no descarta un ajuste de cuentas, debido a que Reyna Cayllahua registraba antecedentes por robo de maquinaria pesada y había sido detenido en agosto pasado durante un operativo policial en Nuevo Chimbote.
El 19 de agosto, efectivos de la Unidad de Prevención e Investigación de Robo de Vehículos (UPIRV) Chimbote capturaron a Reyna Cayllahua junto a Lesly Nathaly Domínguez Rodríguez (27), tras la recuperación de una retroexcavadora Caterpillar valorizada en 120 mil dólares, robada un día antes en la zona de Tangay Alto – Nuevo Chimbote.
Durante esa intervención, la Policía identificó a los implicados como presuntos integrantes de la banda criminal “Los Injertos de Chimbote”, dedicada al robo y comercialización de maquinaria pesada.
Pese a la gravedad de los hechos, Reyna Cayllahua fue dejado en libertad mientras continuaban las investigaciones por los delitos de banda criminal y receptación agravada.

