Los Servicios Industriales de la Marina (Sima Perú SAC) entregará las patrulleras Marítimas N.° 7 y N.° 8 (BAP Río Nepeña y BAP Río Huarmey) a la Marina de Guerra del Perú para fortalecer las labores de control y vigilancia en el mar de jurisdicción nacional.
Ambas embarcaciones, construidas por Sima Perú, pasaron por rigurosas pruebas de sistemas de propulsión, radares, motores y grupos electrógenos, con el objetivo de garantizar que cada unidad esté alistada y en óptimas condiciones para su recepción oficial.
Con esta entrega, según informa el Ministerio de Defensa, el Perú contará con dos nuevas embarcaciones operativas que contribuirán de manera decisiva a la seguridad y defensa marítima, asegurando mayor presencia del Estado en el mar y combatiendo actividades ilícitas como la pesca ilegal y el contrabando.
Precisa además que en el centro de operaciones de Chimbote actualmente se realizan trabajos de mantenimiento en la Patrullera Marítima BAP Quilca, que recibe un mantenimiento de carena y verificación de sistemas de propulsión. Una vez concluidos estos trabajos, volverá al mar en óptimas condiciones.
“El astillero chimbotano también desempeña un rol clave en el sector pesquero, brindando servicios de reparación y mantenimiento a empresas como Exalmar, TASA, Copeinca y Cantabria, lo que fortalece el vínculo entre la industria naval y la economía regional”, indica el sector Defensa.
Asegura además que se prepara para nuevos retos, entre ellos, la construcción de Patrulleras de Intervención Marítima, en convenio con socios internacionales, y la ejecución de proyectos vinculados a la investigación científica pesquera, en coordinación con el Instituto del Mar del Perú.
“Con estos proyectos, el SIMA Chimbote se consolida como un pilar estratégico para la defensa, el desarrollo y la industria naval del país, proyectando al Perú hacia un futuro con mayor soberanía marítima y desarrollo tecnológico”, puntualiza.

