No tuvo otra salida, lo iban a desalojar:
A pocos días para realizarse el lanzamiento judicial del inquilino del inmueble donde funcionaba el colegio no escolarizado “Monseñor Marcos Libardoni”, el dueño de este plantel se retiró voluntariamente llevando sus pertenencias.
La diligencia que estaba programado a realizarse el 23 del presente mes obedece a una demanda de pago del alquiler del primer piso del inmueble que durante tres años no lo ha hecho Ulises Cánepa Balarezo, propietario del colegio.
Mario Minchola, dueño del edificio ubicado en la quinta cuadra de la avenida José Pardo, brindó facilidades al inquilino para que ingrese a retirar el mobiliario de las oficinas y aulas donde funcionó el mencionado centro educativo no escolarizado.
En la azotea del edificio donde funcionaban las aulas de material recuperable se observó que fueron derruidas y las carpetas unipersonales estaban acumuladas en un lado.
En presencia de Mario Minchola, dueño del edificio, Ulises Cánepa retiró su mobiliario en un camión sin problema alguno y sin objetar sobre el estado de sus bienes.
Como se recuerda este colegio fue clausurado definitivamente por la municipalidad provincial del Santa por incumplir con tener su certificado de Defensa Civil e incumplir medidas de salubridad al no contar con los servicios de agua y alcantarillado.
Se desconoce donde funcionará el colegio Marcos Libardoni, sin embargo, para su funcionamiento deberá pasar una inspección por parte de la UGEL Santa y de la misma municipalidad provincial del Santa.
El lanzamiento al inquilino antes mencionado se iba a realizar días previos de la Navidad con apoyo de la fuerza policial, pero eso ya será innecesario.