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Voluntarias de Sagrados Corazones llevaron alegría a Cascajal

En comunidades y Hospital:

Las damas del Apostolado Femenino de Los Sagrados Corazones iluminaron la Navidad de decenas de niños en comunidades lejanas del sector Tupac Amaru, ubicado en Cascajal, del Hospital Regional y de comunidades remotas de Huanchuy, entregando juguetes, refrescos y bizcochos con un desprendimiento que emocionó a todos.

La iniciativa, organizada conforme a los lineamientos de su fundadora y presidente, Elena Suárez de Muro, se dividió en tres fechas distintas para abarcar a los más necesitados.

Los regalos fueron financiados con los fondos recaudados en la actividad solidaria “El Pollito de la Bondad”, que este año registró una mayor acogida que en ediciones anteriores.

Un momento destacado fue la visita a comunidades lejanas de Huanchuy, donde las damas llegaron hasta el centro poblado donde ya las esperaban el profesor de religión Job Vásquez y los niños. Los menores, provenientes de zonas andinas bien alejadas, recibieron los obsequios por primera vez de manos de extraños, lo que generó gratitud profunda.

“Es la primera vez que alguien llega tan lejos para llevar felicidad a estos pequeños”, resaltó el docente Job Vásquez.

En el Hospital Regional, la entrega contó con la presencia del director del nosocomio, médico Sergio Vargas, quien acompañó a las voluntarias hasta las camas de los pacientes pediátricos. La felicidad desbordante de los niños internados llenó las salas, transformando un momento difícil en pura alegría navideña.

Elena Suárez de Muro subrayó el espíritu de la actividad: “La Navidad es compartir, y así lo vive cada socia de los Sagrados Corazones. Por eso nos unimos en ‘El Pollito de la Bondad’ para hacer realidad esta misión”.

Esta labor refleja el compromiso continuo del grupo por extender la solidaridad en la región.