A LA MANO
Como habrá sido de desordenada la gestión del ex Director de la red de salud pacífico Sur, Hugo Meléndez Cuentas, que hace solo unos días se ha podido conocer que solicitaban la provisión de refrigerios de manera verbal, sin que exista o medie documento alguno que lo acredite. Esto se pudo conocer luego de la protesta realizada públicamente por la proveedora de la mencionada entidad Silvia Sotomayor Calderón quien reclamó públicamente el pago de sus facturas pendientes por la suma de 16 mil soles y señaló directamente a la actual directora Leslie sierra Guevara de negarse a pagarle a pesar que ella misma había consumido los desayunos y almuerzos que entregó. Sin embargo, esto no es tan cierto, los servicios que reclama la proveedora son del año pasado, es decir de la anterior gestión de Meléndez Cuentas y gracias a su denuncia ahora se conoce la irresponsabilidad con la que se manejó la institución pues el actual Administrador Luis Zeñas Cenas afirma que no existe una sola orden de servicio que avale la factura que ha presentado la proveedora, en otras palabras, no existe requerimiento que pueda sustentar el pago que reclama. Esto es curioso porque los proveedores son los primeros en conocer que cualquier servicio solo puede prestarse cuando exista una orden o requerimiento del funcionario competente, si no existe es como si nadie hubiera pedido nada. Ahora, la proveedora habla de 350 desayunos y almuerzos que ha entregado durante la campaña de sarampión y rubeola, empero, sin el requerimiento no puede existir pago. Todo indica que la proveedora tendrá que recurrir al Poder Judicial pero allí la cosa no cambiará, le exigirán que acredite la orden de servicio porque en el manejo de recursos púbicos todo es formal, nada es informal y si es que se hicieron las cosas de esa manera, entonces es el proveedor el que se corre el riesgo de quedarse sin el pago respectivo. Nos parece que la proveedora tendrá que ir con sus facturas a tocarle la puerta a Hugo Meléndez, de lo contrario, se quedará con sus documentos y con las ganas de cobrar lo que considera su derecho. Si en el pago de estas provisiones tan simples se ha actuado de esta manera, ya nos imaginamos lo que deben haber encontrado en la Red Pacífico Sur.
EN CAPILLA
Tal como dice ese conocido proverbio popular “el tiro le salió por la culata” a Pedro Reyes Luna, el sempiterno Presidente del mercado Dos de Mayo, quien se hizo reelegir por tercera vez de manera irregular y por ello viene siendo investigado por el Poder Judicial por presunto delito contra la Fe Pública y fraude en la administración de personas jurídicas. La semana pasada los periodistas pudieron asistir a la audiencia en la que el dirigente presentó a dos testigos de descargo, es decir, personas que han visto o apreciado algo en favor de Pedro Reyes, empero, tras el interrogatorio del fiscal y el Juez ha salido muy mal parado. Ocurre que a Reyes se le acusa de haber falsificado las firmas de varias personas en una asamblea general con la finalidad de acreditar que fue elegido por la mayoría que exige la ley, empero, hay muchas personas que recusaron ese documento y que alegaron que ellos jamás firmaron y no entienden como aparecen avalando una elección a todas luces ilegal. Cuando se hizo el cotejo respectivo se estableció, mediante un peritaje, que en efecto las firmas no correspondían a los nombres que aparecen en el acta, por lo que Pedro Reyes llevó a testigos para que desmientan esta versión. Sin embargo, al ser interrogados por el Fiscal y el juez los testigos cayeron en groseras contradicciones, quedando en evidencia que se trataba de testigos de favor. De esta manera los cargos en su contra de van fortaleciendo y se consolida la drástica acusación que ha formulado el Ministerio Público. Nos huele a otro caso que terminaría en cambio Puente.
CANA
No hay duda que la justicia está respondiendo a las necesidades de sanción contra aquellos que utilizaron los cargos públicos para llenarse los bolsillos, en la época del gobierno regional de César Álvarez, más conocida como red de corrupción. Así los investigados del caso de la desratización, del ex abogado de César Álvarez ya fueron sentenciados y algunos van camino a ese mismo derrotero como el caso COFI Master y de los ex funcionarios de Chinecas. Pero quienes estaban pasando piola son los ex consejeros pues se sabe que muchos de ellos se prestaron a ese juego inmoral de las obras, los viajes y los pagos de diezmos con los cuales Álvarez siempre mantuvo mayoría pese a que su agrupación no tenía la mayor cantidad de miembros en el consejo regional. Tal parece que a la justicia de Huaraz no se le ha pasado ese tema, por ello la fiscalía anticorrupción de esa ciudad acaba de acusar a la ex consejera regional de Huaraz Cheldy Rosa Castillo y pide le impongan 8 años y cuatro meses de prisión por delito de enriquecimiento ilícito. La Fiscalía ordenó el peritaje y se le detecto un desbalance patrimonial impresionante, entre ellos la edificación de una propiedad en los tiempos que era consejera sin que se justifique con sus ingresos. Con esa acusación todo huele a cana.