Se le truncó la vida a los 33 años:
Juan Carlos Rivera Ávalos era un joven chef de 33 años de edad siempre deseoso de salir adelante para poder seguir ayudando a sus padres y poder realizarse plenamente como esposo con su pareja, compañera inseparable de sus emprendimientos.
Todos sus sueños fueron truncados la tarde del domingo por la irresponsabilidad del chofer del auto que chocó contra la motocicleta que conducía lanzándolo a la pista y ocasionandole la muerte instantánea.
Mientras este accidente ocurría en la prolongación de la avenida José Pardo (altura del puente Lacramarca) en la vía de norte a sur; en la Plaza Mayor de Nuevo Chimbote su pareja lo esperaba a que llegara con algunos artículos para el puesto de venta de joyas que ella había instalado.
Él nunca llegó al puesto de su pareja. Ella se enteró de su lamentable deceso quedando sumida en un profundo dolor e incontenible llanto. Este mismo sentimiento se apoderó de sus ancianos padres en su domicilio en el asentamiento humano “15 de Abril”.
Juan Carlos Rivera había estudiado para ser chef y se desempeñaba como tal de manera independiente. En todos los eventos en los que prestó su servicio siempre quedaron satisfecho. Y es que se esmeraba porque tenía que reunir dinero para la operación a los ojos de su padre Marciano Rivera Zeña, en la ciudad de Trujillo, dijeron familiares.
Tras la desgracia de la pérdida del joven chef se cierne un daño más severo a la vista de su progenitor quien ahora se queda solo con su anciana esposa desprovisto de la ayuda que les brindaba el hijo en su humilde hogar en “15 de Abril” E1 – 03.
Hasta esta vivienda llegaron familiares y amigos para acompañar en el velatorio y todos piden al unísono justicia y severa sanción para el responsable que acabó con la vida de un ser humano útil a la sociedad.