La historia llegó a su fin: el atacante peruano Paolo Guerrero sí jugará en la Universidad César Vallejo (UCV) y mañana, jueves 22, se sumará a los entrenamientos del ‘cuadro poeta’ en la ciudad de Trujillo.
La confirmación de este desenlace la proporcionó César Acuña, gobernador regional de La Libertad y padre del presidente del club UCV, Richard Acuña, en una entrevista con RPP Noticias.
Poco después, el club naranja publicó en redes sociales un comunicado dando cuenta del arreglo definitivo entre el ‘Depredador’ y la directiva de la institución.
De acuerdo con el texto, Guerrero se sumará al plantel profesional de la UCV “en las próximas horas” para ponerse a órdenes del comando técnico que dirige Roberto Mosquera.
A principios de febrero, Guerrero firmó un contrato para jugar por la UCV durante toda la temporada 2024. Sin embargo, días después expresó públicamente su intención de no cumplir dicho acuerdo, argumentando razones de seguridad.
Para el club, no había razón para que Guerrero cortara el vínculo con el cuadro poeta. En consecuencia, fijó como plazo el martes 20 de febrero para que el ‘Depredador’ se presentara a los entrenamientos en Trujillo, con cargo de exigir el pago de una penalidad económica por incumplimiento de contrato.
Guerrero y su novia, Ana Paula Consorte, llegaron el martes 20 al Perú y este miércoles sostuvieron una reunión con Richard Acuña, a cuyo término surgieron las primeras versiones sobre un arreglo final entre las partes.
El primer indicio del acuerdo entre Paolo y Acuña fue un pulgar en alto: Julio Rivera, hermano de Paolo y asistente a la reunión de hoy con Acuña, fue abordado por la prensa mientras conducía el vehículo que trasladaba al atacante y sus familiares.
Al paso, los periodistas le preguntaron si había arreglo, a lo que el ‘Coyote’ Rivera respondió simplemente levantando el pulgar de su mano derecha.
“Amenazas reales”
El comunicado de la UCV indica que el club “reconoce que en las últimas semanas se produjeron amenazas reales a la integridad de la familia de Paolo, lo cual significó la razonable duda sobre darle continuidad al contrato suscrito”.
“El club expresa las disculpas por cualquier distorsión que hubiera podido dar sustento a dicha versión. Y del mismo modo, se reconoce que se ha dejado en claro el sentido de cualquier expresión malinterpretada”, continúa.
El texto se refiere también a la seguridad ciudadana. “Dejamos expresa constancia del vital interés de Paolo y el Club, que lo sucedido a él y su familia, permita redoblar los esfuerzos de las autoridades competentes por garantizar la seguridad, especialmente, de los trujillanos y peruanos más vulnerables”.
“Del mismo modo, César Vallejo hace público su compromiso de tomar todas las medidas de seguridad necesarias a fin de garantizar el bienestar de nuestro futbolista José Paolo Guerrero, así como de todo el plantel profesional”.